- La paciente de 43 años de edad, representada por nuestro centro médico jurídico, ha interpuesto demanda contra el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) para el reconocimiento de su incapacidad permanente.
- ver sentencia
La trabajadora de profesión administrativa padece de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica muy acusada, además de un cuadro clínico ansioso depresivo reactivo a su patología física, lo que le impedía continuar con su actividad laboral habitual a causa de las limitaciones que sus patologías le provocan.
La fibromialgia, como es sabido, es una enfermedad de difícil diagnóstico y tratamiento complejo, por lo que es habitual que los pacientes que sufren fibromialgia tengan dificultades en el reconocimiento de la incapacidad permanente por parte de la Seguridad Social.
Cabe tener en cuenta que la detección de este tipo de patologías de sensibilización central no determina automáticamente el reconocimiento de un grado de incapacidad permanente, siendo necesario, además del diagnóstico diferencial, la constancia de datos tales como el número de puntos gatillo positivos, el tiempo de evaluación de la enfermedad, el tratamiento y la respuesta a los mismos, así como, y esencialmente, el nivel de repercusión funcional en su caso concreto.
El INSS denegó, inicialmente, la incapacidad a la trabajadora alegando "no afecta de incapacidad permanente en ningún grado de invalidez", teniendo que recurrir a los juzgados para el reconocimiento de su pensión.
Ante la correcta presentación de informes médicos y argumentos jurídicos el juez procedió a estimar la demanda interpuesta por la paciente, junto a los profesionales de nuestro centro, declarándola en situación de incapacidad permanente en grado de absoluta para todo tipo de trabajo, condenando al Instituto Nacional de la Seguridad Social al abono del 100% de su base reguladora de 1.212,83€ con efectos desde el mes de marzo del 2019. (ver sentencia)
