El sufrimiento fetal es el nombre que reciben el conjunto de complicaciones en el parto relacionadas con la insuficiencia de oxígeno y nutrientes para el feto/bebé
Encontramos dos tipos de sufrimiento fetal:
- Sufrimiento fetal agudo. Esta especialidad se da durante el parto e implica que hay que provocar el parto lo antes posible, de lo contrario, las consecuencias puede ser muy graves.
- Sufrimiento fetal crónico. Este tiene lugar durante el embarazo, por lo que tiene que adelantarse cuanto antes del parto.
Si los médicos no actúan adecuadamente antes estas complicaciones, puede entrar en juego una negligencia médica hecho que da lugar a una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados.
¿Cuáles son los signos que indican la existencia de sufrimiento fetal?
Hay diversas señales que acontecen durante el embarazo o en los momentos previos y/o durante el parto que indican la existencia de sufrimiento fetal. Principalmente, son los siguientes:
- Disminución del movimiento fetal en el vientre
El movimiento del bebé dentro del útero es un indicador importante de la salud del mismo. La disminución o el cese del mismo puede ser indicativo de que algo no va bien en el embarazo, motivo por el cual debe ponerse en conocimiento del médico de inmediato.
Si ello no se detecta con la rapidez que debería, puede dar lugar a consecuencias muy graves.
A pesar de que pequeñas cantidades de sangrado son comunes durante el embarazo, un contundente o continuo sangrado vaginal puede ser indicativo de que el embarazo no evoluciona correctamente. En este caso, el médico tiene que realizar una evaluación adecuada y asegurar que el bebé está recibiendo el oxígeno que necesita. Si no hace las pruebas oportunas, y hay un sufrimiento fetal con graves consecuencias, el médico está incurriendo en una negligencia médica.
La presión arterial de las embarazadas tiene que controlarse de forma exhaustiva puesto que, en caso de alta presión arterial puede suceder que no llegue suficiente oxígeno al bebé, dando lugar así a lo que conocemos como sufrimiento fetal.
Si la presión arterial de la mamá no se controla o se controla inadecuadamente pueden darse consecuencias negativas al bebé que derivan de una negligencia médica.
- Presencia de sustancias anormales en el líquido amniótico
Si no se detecta la presencia de sustancias anormales en el líquido amniótico o una vez detectadas no se actúa en consecuencia, el profesional sanitario puede incurrir en una negligencia médica.
Los mencionados son alguno de los signos que indican la existencia de sufrimiento fetal, de modo que si no se controlan correctamente por parte del médico responsable puede dar lugar a una actuación contraria a la lex artis, incumpliendo así las obligaciones que tienen los profesionales sanitarios y causando daños irreparables tanto en la madre como en el bebé.
Generalmente, ante los signos de sufrimiento fetal agudo, este es, el sufrimiento durante el parto, los profesionales tienen que actuar con rapidez, estableciendo los protocolos que debe practicarse cesárea dentro de un tiempo máximo de 30 minutos. Transcurrido este límite de tiempo, se pueden provocar graves secuelas al bebé, y las mismas pueden ser por una negligencia médica del profesional sanitario.
¿Qué consecuencias tiene el sufrimiento fetal?
Como ya hemos indicado con anterioridad, el sufrimiento fetal es el nombre que recibe el conjunto de complicaciones en el parto relacionadas con la insuficiencia de oxígeno por parte del bebé.
Por lo tanto, la principal consecuencia del sufrimiento fetal es la falta de oxígeno hacia el bebé, produciendo así un afectación grave tanto a los órganos como al sistema nervioso central. Por ello, la secuela más común derivada del sufrimiento fetal es la parálisis cerebral.
¿Tengo derecho a una indemnización en caso negligencia médica por sufrimiento fetal?
Como se ha mencionado en el presente artículo, sí hay lugar a una indemnización en caso de negligencia médica por sufrimiento fetal.
Generalmente, el importe de la indemnización por este tipo de negligencia médica suele ser muy elevado puesto que los daños que pueden producirse a la mamá y/o al bebé son de una gran magnitud y, en la mayoría de ocasiones, irreversibles. Así, generalmente, no únicamente se solicita una indemnización por los daños sufridos sino también se reclaman los gastos futuros a los que tendrá que hacer frente la familia derivados del cuidado de su hijo.
Cómo reclamar en caso de ser víctima de una negligencia médica por no detectar sufrimiento fetal
Si cree que ha sufrido una negligencia médica por no detectar a tiempo el sufrimiento fetal, le recomendamos actuar en consecuencia. Por ello, ante la sospecha de mala praxis médica, el primer paso que tiene que dar es contactar con un abogado especialista en derecho sanitario para que estudie el asunto detalladamente y, en consecuencia, la viabilidad de la reclamación por los daños y perjuicios causados.
En términos generales, los pasos a seguir son los siguientes:
- Solicitar el historial clínico completo. En el caso de que la clínica o el hospital deniegue la entrega completa del historial clínico, o consideremos que el mismo no es completo, el abogado puede dirigir un escrito al Juzgado mediante el cual se exige a la clínica la aportación del mismo.
- Estudio de la documentación. En ocasiones, la documentación también tiene que ser estudiada por parte de un perito médico especialista, quien nos indicará principalmente en qué momento ha habido negligencia médica.
- Demanda judicial con indemnización de los daños y perjuicios ocasionados. Si se confirma la existencia de negligencia médica, el abogado interpondrá demanda judicial junto con el informe del perito médico.
En determinadas ocasiones, con anterioridad a la demanda judicial, se trata de llegar a un acuerdo extrajudicial y, en caso de que el mismo no sea exitoso, la siguiente opción es interposición de la correspondiente demanda.
Es de gran importancia prestar atención a los plazos, puesto que las reclamaciones por negligencia médica están sujetas a plazos muy breves.