Se trata de una de las propuestas que fueron presentadas por la Coordinadora de Profesionales por la Prevención de Abusos (CoPPA) a los grupos parlamentarios para enmendar el proyecto de Ley de Familias, y que ha sido aprobada por el Congreso de los Diputados a través de una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno de España a ampliar algunos permisos laborales, entre ellos el correspondiente al fallecimiento de hijos.

 

Entre las propuestas de enmiendas que presentó en abril con motivo de la tramitación del Proyecto de Ley de Familias, CoPPA propuso a los grupos parlamentarios elevar el número de días de permiso laboral retribuido cuando muere un ser querido, una traumática situación que, según argumenta, se encuentra llamativamente infravalorada en la legislación. El motivo argumentado por esta entidad, de la que forman parte profesionales de la salud mental, es que los dos días actualmente permitidos por el Estatuto de los Trabajadores es un tiempo totalmente insuficiente en estos casos, teniendo en cuenta el impacto psicológico y emocional que conlleva para cualquier persona una situación de este tipo.

Como ilustrativo ejemplo de lo anterior, en su documento de propuestas y en reuniones con grupos parlamentarios, CoPPA explicaba la incongruencia existente entre el permiso de dos días reconocido por el fallecimiento de una hija o hijo, y el que se aplica en caso de matrimonio o pareja de hecho.

“Es una diferencia absolutamente injustificada e ilógica”, señala la Dra. Elsa Alonso, médico psiquiatra miembro de CoPPA. “En la actualidad, la legislación laboral permite 15 días de ausencia retribuida para la luna de miel y, sin embargo, en el caso de la muerte de un hijo, o de la pareja… un evento manifiestamente traumático, sólo se prevén 2 días. Esta incongruencia resulta incomprensible, más aún si se tiene en cuenta que la falta de reconocimiento de la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran el trabajador o trabajadora en la fase inicial del duelo puede contribuir al desarrollo de problemas que mermarán su salud y afectarán a su rendimiento laboral a largo plazo”.

Por ello, en sus propuestas de enmienda al proyecto de Ley de Familias, CoPPA insistía específicamente en este problema, argumentado según resultados de estudios e investigaciones sobre duelo, y proponía elevar el permiso en estos casos a, como mínimo, siete días. “Dos únicos días de permiso tras haber sufrido la pérdida de un familiar cercano, supone a todas luces una falta de reconocimiento y una desautorización del duelo” afirman.

Permiso retribuido de diez días hábiles

CoPPA celebra que el Congreso de los Diputados haya atendido a esta problemática y aprobado solicitar al Gobierno de España que promueva una modificación legislativa en este sentido, aunque sea limitada al fallecimiento de hijos, lo que debería ampliarse a otros supuestos.

Concretamente, entre otros puntos la cámara parlamentaria ha pedido al Gobierno: “4. Plantear las modificaciones normativas oportunas para garantizar por ley la existencia de un permiso retribuido de diez días hábiles para los trabajadores por cuenta propia y por cuenta ajena por el fallecimiento de una hija o hijo. Cuando con tal motivo la persona trabajadora necesite hacer un desplazamiento al efecto, el plazo se ampliará, como mínimo, dos días más o cuantos resultara imprescindible para trasladarse a los lugares de defunción o exequias”.

CoPPA recuerda que ésta es la línea que están siguiendo los países vecinos Francia y Portugal, en lo que se califica como una humanización del Estatuto de los Trabajadores. “Se trata de reconocer el dolor y el impacto que la pérdida de un ser querido tiene inevitablemente para las personas en todos los ámbitos de su vida, incluido el laboral, y que las sitúa en una situación de vulnerabilidad ante la que deben contar con el amparo y protección de la legislación y los poderes públicos” manifiestan.