Estrasburgo (Francia), 28 feb (EFECOM).- La Unión Europea (UE) permitirá que se pueda empezar a conducir coches y camiones desde los 17 años si el conductor novel va acompañado de uno con experiencia, después de que la Eurocámara y Consejo de la UE coincidan en su enfoque en la revisión en curso de la Directiva sobre Permiso de Conducir.

El Parlamento Europeo aprobó hoy -con 339 votos a favor, 240 en contra y 37 abstenciones- su posición para la negociación definitiva de la normativa con los Estados miembros, representados en el Consejo de la UE, y los tres poderes que colegislan en el espacio comunitario están de acuerdo sobre esa medida.

No obstante, no dará tiempo a que se concluya la negociación con los Estados miembros y se adopte antes de las elecciones al Parlamento Europeo del próximo mes de junio, por lo que la tramitación continuará en la próxima legislatura.

La revisión parte de una propuesta de la Comisión Europea de marzo de 2023 con el objetivo último de alcanzar las cero muertes por carretera en la UE en 2050, frente a los más de 20.000 decesos anuales en la actualidad.

Pretende también modernizar y estandarizar otros aspectos de las licencias, armonizar sanciones, pero también reaccionar ante la escasez de conductores profesionales.

La Comisión abogaba por permitir conducir a partir de los 17 años si va acompañado de un mayor de 25 con 5 años de carné, requisito que los Estados miembros prefieren rebajar a 24 años, pero limitando la circulación al país que emite el permiso, y la Eurocámara prefiere mantener en 25 años pero con validez para circular en toda la UE.

Los eurodiputados abogan también por que los conductores noveles tengan que superar un periodo de prueba de al menos dos años durante el cual estarán sujetos a límites más estrictos sobre el consumo de alcohol y sanciones más altas por conducción peligrosa.

Escasez de conductores

Dada la escasez de conductores profesionales, la Eurocámara también respalda que se pueda acceder al permiso para camiones o autobuses hasta 16 pasajeros desde los 18 años, una vez obtenido "un certificado de capacitación profesional".

El Parlamento se alinea así con los Estados miembros, que también abogan por rebajar la edad de conducción de camiones de los 21 a los 18 años.

Carné digital y formación

Otro de los aspectos de la propuesta que apoyan tanto el Parlamento como el Consejo es la creación de un permiso de conducir digital, que podrá almacenarse en el teléfono móvil y equivaldrá al carné físico.

Además, para reducir la siniestralidad al volante, la propuesta avanza hacia reforzar la formación para que los conductores estén mejor preparados en situaciones de conducción real y sean más conscientes de los riesgos para peatones, niños, ciclistas y usuarios de patinetes eléctricos.

Para ello, el Parlamento propone incorporar al examen para obtener el permiso la conducción sobre nieve y en condiciones resbaladizas, el uso seguro del teléfono durante la conducción, los puntos ciegos, los sistemas de asistencia al conductor y garantizar que sea seguro abrir las puertas del vehículo.

Examen médico

Uno de los aspectos más polémicos del debate parlamentario giró entorno a la obligatoriedad de exigir un examen médico al menos cada 15 años para renovar el carné, en el que se evalúe la capacidad física y mental de los conductores.

En España, que ya incorpora ese tipo de requisitos en su legislación nacional, unos 2,5 millones de personas se someten anualmente al reconocimiento para obtener un informe de aptitud psicofísica que les permita renovar el carné.

Ocurre también en otros trece países de la UE -como Grecia, Lituania, Países Bajos, Hungría o Dinamarca- y en países como Argentina o Suiza, pero no el resto de los Veintisiete.

Finalmente, la Eurocámara deja a discreción de los Estados miembros, como hasta ahora, la decisión de si una autoevaluación del conductor es suficiente para renovar el carné.

El Parlamento también defiende que el permiso para turismos y motocicletas tanga una vigencia de 15 años, y no de 10 como en España, pero no respaldan que se acorte la validez de la duración válida para los mayores de 65 años como proponía la Comisión.