En los últimos años la abogacía está viviendo un proceso de transformación digital muy importante, un proceso que, como otros sectores, se vió acelerado por la llegada de la pandemia. Los despachos tuvieron que adaptarse a nuevas formas de trabajar, la implantación del teletrabajo, la gestión de servicios en la nube cambió radicalmente la forma de comunicarse con los clientes, siendo la videoconferencia una de las soluciones que, también, han llegado para quedarse.

No solo afectó a la comunicación con los clientes sino también en la captación y en la comunicación de la marca de los despachos, así, como nos comentan desde  GJ Defensa Legal “las acciones de marketing digital para los despachos de abogados se ha incrementado notablemente, especialmente a raíz de la pandemia del coronavirus, realidad que implicó un claro impulso para la digitalización de las empresas del sector legal”.

¿Qué es el Marketing jurídico?

El Marketing jurídico es la estrategia que utilizan los bufetes de abogados y los profesionales del derecho para promocionar sus servicios y atraer a nuevos clientes. Es una herramienta que en materia de difusión y conocimiento de marca del despacho y como estrategia de captación de clientes que se ha vuelto cada vez más popular en los últimos años debido a la creciente competencia en el mercado legal y a la necesidad de los abogados de destacarse entre sus competidores.

El marketing jurídico implica la utilización de diversas técnicas y herramientas de marketing para atraer a nuevos clientes y aumentar la visibilidad del bufete. Estas técnicas pueden incluir desarrollo de páginas web corporativas, creación de blogs, publicidad on líne y off line, relaciones públicas, envío de newsletter, redes sociales, emisión de notas de prensa, participación en eventos y conferencias, entre otras.

Una de las técnicas de marketing jurídico más efectivas es el posicionamiento en motores de búsqueda (SEO). Esto implica la optimización del sitio web del bufete para que aparezca en los primeros resultados de búsqueda cuando alguien busca un servicio legal específico en su área. Esto puede ayudar a atraer a clientes potenciales que están buscando activamente servicios legales en línea.

Otra técnica importante de marketing jurídico es la gestión de reputación en línea. Esto implica monitorear y gestionar las reseñas en línea del bufete, incluyendo las redes sociales y sitios web de reseñas como Google My Business. La gestión adecuada de la reputación en línea puede ayudar a mejorar la percepción del bufete y atraer a nuevos clientes.

Las relaciones públicas también son importantes para el marketing jurídico. Los bufetes pueden utilizar los medios de comunicación para generar publicidad gratuita y mejorar su reputación. Esto puede incluir la realización de entrevistas con medios locales o nacionales, la publicación de artículos de opinión en medios especializados o la participación en eventos y conferencias.

En este sentido, cabe incluir una herramienta tradicional como es la publicación de artículos en medios generalistas o especializados o en la propia web corporativa.

Recurrir al correo electrónico también es una técnica efectiva de marketing jurídico. Los bufetes pueden utilizar el correo electrónico para enviar información relevante a través de newsletter o comunicaciones periódicas a clientes actuales y potenciales, en forma de boletines informativos, con actualizaciones legales y/o jurisprudenciales, el éxito en casos importantes o invitaciones a eventos.

En conclusión, el marketing jurídico es una estrategia importante para cualquier bufete de abogados que busque atraer a nuevos clientes y destacarse entre la competencia. Las técnicas y herramientas de marketing efectivas incluyen el SEO, la gestión de reputación en línea, las relaciones públicas y el marketing por correo electrónico, entre otras. Al implementar estas técnicas, los bufetes pueden mejorar su visibilidad en línea, mejorar su reputación y atraer a nuevos clientes.