Ante el Colegio de Abogados de Orihuela se denuncian diariamente, tanto por los propios colegiados así como por letrados extranjeros, el aumento de víctimas que han visto perjudicado su patrimonio a causa de fraudes relacionados con el intrusismo profesional en las zonas de la costa. Igualmente, se ha detectado un incremento progresivo de sujetos que ilícitamente ofertan la prestación servicios jurídicos o legales, careciendo del título habilitante legalmente exigido para ejercer la profesión de abogado, actuando bajo una falsa apariencia de legalidad.

Cuando una persona no autorizada legalmente realiza actos propios de la profesión de abogado se denomina intrusismo profesional y es una conducta delictiva, perseguida por el Código Penal en su artículo 403, que prevé la imposición de una pena de hasta dos años de prisión, a la que pueden ser condenados quienes realicen actos propios de una profesión regulada sin tener el título profesional legalmente exigido.

El Colegio de Abogados de Orihuela viene luchando con especial interés en los últimos años contra el intrusismo profesional, que se encuentra enraizado en zonas turísticas de la Vega Baja del Segura, especialmente en Torrevieja y Orihuela Costa. Esta práctica perjudica enormemente a ciudadanos extranjeros que invierten sus ahorros y trasladan su residencia a la comarca, resultando afectados por estas prácticas ilegales, que deben ser reprimidas en defensa de las víctimas y de la buena imagen de la abogacía española, interesada siempre en prestigiar y favorecer la calidad de los servicios jurídicos que ha de recibir cualquier ciudadano.

 

De conformidad con lo previsto en el Estatuto General de la Abogacía, en la Ley Orgánica del Poder Judicial y en la Ley 34/2006 de acceso a la profesión de abogado y procurador, solo es abogado  aquel Licenciado o Graduado en Derecho, que habiendo obtenido el título profesional de abogado, es incorporado a un Colegio de Abogados como ejerciente, resultando excluidos de esta profesión los inscritos como no ejercientes, así como aquellos quienes, pese a utilizar denominaciones con connotaciones jurídicas, muchas veces en lenguas extranjeras, tales como serían por ejemplo en el idioma inglés legal advisers/advisors, legal assistants, legal consultants, legal experts, conceyancing experts, etc., no tengan la habilitación legalmente exigida en nuestro país para actuar como abogados.

Por esta razón, en defensa de las víctimas, de los consumidores y en el prestigio de la Abogacía, se pone en marcha nuevamente una compaña contra el intrusismo profesional: “ANTE UN LÍO NO TE COMPLIQUES Y ACUDE A TU ABOGADO” y en versión inglesa, “DON´T MAKE A MISTAKE, GO TO SEE YOUR LAWYER”en aras de concienciar a los consumidores de servicios jurídicos, así como a las agencias inmobiliarias, intermediarios, consulados, embajadas, y asociaciones de protección y ayuda a consumidores principalmente extranjeros, para que el patrimonio de las potenciales víctimas esté protegido en las manos de un abogado como único profesional cualificado para garantizar sus derechos, sus intereses y su patrimonio. Igualmente, en la lucha contra este fraude, se insta a todos los compañeros para que den difusión a esta campaña en la medida de sus posibilidades compartiendo las publicaciones que desde nuestra institución se publican hoy en las redes sociales.

Igualmente conviene informar a los clientes de la existencia del Censo de Letrados, desarrollado por el Consejo General de la Abogacía Española, que publica un registro general de todos los abogados de España, y a través del que cualquier persona, sin coste alguno, puede averiguar si el “abogado” que se presenta como tal o la persona física o jurídica que ofrece servicios con contenido jurídico y legal, está o no legalmente habilitado para ello.

Además, el Colegio de Abogados de Orihuela pone al servicio de cualquier ciudadano español o extranjero la información que precisen sobre la capacidad profesional de “Abogados”, que así se denominen o que aparenten serlo por realizar actos propios de la profesión, en aras de protegerlos de conductas fraudulentas llevadas a cabo por  estos falsos profesionales.