La innovación podríamos definirla como aquel cambio que produce novedades. Estas novedades suelen tener la finalidad de mejorar aquello que se innova, por diversos motivos: ser más competitivos, tener más posibilidades en el mercado, poder ofrecer mejores condiciones a los clientes…
En el mundo en el que vivíamos actualmente, se han producido innovaciones en muchos sectores, sin embargo, el hablar de innovación en el sector legal, a día de hoy, puede parecer todavía un poco utópico. La realidad del sector legal, es que siempre ha ido un poco por detrás del resto, en cuanto a su modernización. Hace muchos años en este sector, no había hueco para los más “curiosos”, pues nadie quería invertir en investigación o nuevas técnicas, ya que se veía como una “pérdida de tiempo”. Se dice que "ha sido un sector poco innovador en el servicio". Lo que no sabían era que en pleno siglo XXI, la innovación es uno de los aspectos fundamentales a la hora de hablar de cualquier trabajo.
Internet
Internet facilita la información adecuada, en el momento adecuado, para el propósito adecuado, como bien dijo Bill Gates, Internet es una herramienta clave para el día a día de todos. Pero como todo, hay que saber cómo usarla para darle la mayor rentabilidad. Y esto mismo pasa con el sector legal.
Una de las principales características y ventajas, es, seguramente, su rapidez. En el mundo en el que vivimos, el tiempo es un aspecto fundamental. Es por esto, que el hecho de saber utilizarlo de manera correcta, puede suponer una gran ventaja.
Los despachos de abogados, por ejemplo, podrán actualizar sus noticias al instante o contactar con sus clientes, y ello supondrá una ventaja recíproca tanto como para el despacho, como para sus clientes.
Sin embargo, ¿cuál es el problema?
Todo lo que he mencionado anteriormente sobre la tecnología parece algo “sencillo” que realmente no cuesta mucho esfuerzo conseguir. Por lo que la pregunta ahora sería, ¿cuál es el verdadero motivo por el cual las firmas no innovan?
Introduciéndonos en el tema de los despachos de abogados, en muchas ocasiones se ha llegado a pensar que el “innovar”, era solo para grandes firmas, y las nuevas o más pequeñas no invertían en desarrollo. Lejos de ello, la realidad es completamente distinta. Hay empresas más pequeñas que innovan mucho más y están mucho más activas que las empresas grandes, importantes y tradicionales. Esto es porque aquellas necesitan hacerse un hueco en el mercado, captar nuevos clientes, y al ver que en la actualidad todo el tema del desarrollo es tan importante, juegan con esa ventaja. El problema es que muchos despachos de abogados que llevan años y años en el mercado, creen, que como hasta ahora les ha ido bien con la política que llevaban no deben preocuparse, se encontraban en una zona de “confort”.
La abogacía es una profesión antigua, y como hay despachos que son muy rentables, no creen necesario el adaptarse a los nuevos cambios.
Algo completamente erróneo, dado que debemos puntuar que el derecho no es algo estático, sino que va evolucionando y debe adaptarse a la realidad de los tiempos.
Posibles soluciones
Relacionado con esto último que mencionaba, las empresas se plantean en qué es lo que deben innovar. Estructura interna, externa, muchas son las preguntas que se hacen los despachos españoles a la hora de plantearse un cambio.
Trabajadores:
Para que en los despachos de abogados pueda darse un verdadero desarrollo, es esencial la formación de los trabajadores, pues ellos son los que al fin y al cabo van a sacar la firma adelante. Para esto, es necesario empezar a formarlos desde 0, e incluso, me atrevería a decir que quizás en las Universidades, se deberían impartir clases de este tipo, para que los futuros abogados no lleguen al mercado laboral “en pañales”.
Por otro lado, la motivación de los trabajadores es fundamental para que el trabajo salga como y cuando debe.
Los despachos:
Una vez que se tiene claro la importancia de la innovación, lo que hay que ver es de qué manera se va a innovar. Para innovar hay que ser por un lado creativo y por otro lado, hay que conocer bien a los clientes para poder saber qué es lo que ellos quieren y buscan. Las personas a la hora de contratar unos servicios u otros, buscan comodidades, es decir, al final acuden a aquel que le dé mejores soluciones y de la manera más rápida posible.
Para todo ello se necesita contar con los profesionales adecuados, y a éstos se necesita incentivarles para que hagan lo mejor posible su trabajo. Todo ello va a hacer que el despacho, tenga lo que en economía se denomina como una “ventaja competitiva” sobre sus competidores.
Conclusión:
En conclusión, querría acabar con que, con el tema de la innovación, hay despachos que continúan y continuarán creciendo, aquellos que inviertan en desarrollo, mientras que otros se quedarán por el camino. Por eso siempre decimos que la inoperancia de algunos, es la ventaja competitiva de otros. Como dijo el premio Nobel de literatura André Gide, el porvenir pertenece a los innovadores.
Nerea Martínez de Larramendi Herrero, estudiante en la Universidad Pontificia de Comillas (ICADE). Grado en Derecho y Diploma en Business Law (E-1).
Bibliografía
http://marketingparaabogados.eu/innovacion-en-el-sector-legal/
http://gericoassociates.com/la-innovacion-en-el-sector-legal-ya-es-una-opcion/
http://cincodias.com/cincodias/2012/04/30/economia/1336034435_850215.html
http://www.legalmanagementforum.es/es/component/content/article/87-legalforum15/noticias/210-cronica-del-legal-management-forum-2015-la-abogacia-del-futuro-tendra-que-reinventarse
http://www.expansion.com/juridico/opinion/2016/04/01/56feb03b46163fff138b4623.html