Los abogados ya avisaron de que tras el parón en las demandas de disolución matrimonial producido durante la pandemia vendría un verdadero boom de divorcios. Y parece que ha comenzado, a juzgar por las últimos cifras del Consejo General del Poder Judicial : En el primer trimestre de 2021 las separaciones y divorcios consensuados se incrementaron en un 9,7 por ciento con respeto al año pasado; por el contrario, las separaciones no consensuadas disminuyeron un 14,4 por ciento. Si se toman en consideración todos los tipos de demanda de disolución matrimonial, en el periodo analizado se produjo un aumento interanual del 5,7 por ciento.

María Pérez Galván, vicepresidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia, prevé un aumento de las solicitudes de divorcio. “El desamor va unido al tema económico y la relación que no estaba firme se ha terminado de romper con la pandemia. También ha habido un repunte de las personas que acuden al despacho, que no están casadas pero cesan la convivencia y necesitan realizar tramitaciones y llegar a pactos”, comenta.

La abogada explica que durante todos los meses del confinamiento han seguido trabajando para conseguir acuerdos, sin necesidad de acudir presencialmente a un juzgado. “Es mejor un buen acuerdo que un mal pleito, sobre todo, cuando hay niños de por medio”. Junto a estos asuntos negociados, se ha producido también un aumento de los divorcios a través de notarios, “los que se realizan cuando el matrimonio no tiene hijos o éstos son mayores de edad”. En su opinión, las separaciones no consensuadas han disminuido porque, “ante el retraso en la celebración de juicios y el repunte de nuevas demandas, están citando en el Contencioso-Administrativo para la primavera del año que viene”. Por eso, es fundamental la creación de Juzgados de Familia Especializados y más medios técnicos y humanos, “una de las principales reivindicaciones de la Asociación”, añade.

Canarias, Comunidad Valenciana, Cantabria y Murcia encabezan la lista de territorios que superaron la tasa media. Las tasas más bajas del trimestre se dieron en Madrid, con 4,3; Castilla y León, con 4,4; y País Vasco, con 4,7.

Por último, todas las demandas de modificación de medidas en procesos de separación y guardia, custodia y alimentos de hijos, tanto matrimoniales como no matrimoniales, aumentaron en el primer trimestre de 2021, especialmente las consensuadas, que se colocaron en niveles muy superiores a los del primer trimestre del pasado año.

Las demandas de disolución matrimonial cayeron un 13% en el 2020, según el último informe del CGPJ. Pero expertos advirtieron que era debido a la crisis económica, por la que las parejas prefirieron postergar el divorcio.