La Sala II del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de dos años de cárcel para un empresario zaragozano por la expulsión a la atmósfera de gases contaminantes procedentes de frigoríficos que eran triturados en una planta tecnológica en Zaragoza.
El Supremo ratifica la inhabilitación especial del empresario durante tres años para el ejercicio de la profesión de gestor de residuos y confirma la pena de un año de cárcel para el encargado de la planta por el mismo delito.
Tribunal Supremo resuelve con esta sentencia el recurso presentado por ambos condenados contra la sentencia dictada por la Sección VI de la Audiencia Provincial de Zaragoza, el 19 de noviembre de 2015, causa seguida por delitos contra el medio ambiente y recursos naturales.
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