Con motivo del Día Internacional de Eliminación de Violencia Contra la Mujer, el Consejo General de la Abogacía Española, a través de su Subcomisión de Violencia sobre la Mujer, publica este manifiesto:

En un año que será recordado como el que alteró nuestra forma de vida, y la de toda la sociedad, la violencia de género ha seguido estando presente en la realidad de la sociedad española.

La prohibición de salir de los domicilios y ahora el toque de queda podía hacer pensar que la tensión que soportan las miles de mujeres que sufren en silencio estas agresiones podían multiplicarse, pero no ha sido así. No sabemos si afortunadamente o por una desconfianza en el sistema.

Asistimos desde la Abogacía con preocupación a como en el segundo trimestre de 2020 las denuncias bajaron un 14,62 por ciento respecto al mismo trimestre de 2019, y ello pese a que la actividad judicial relacionada con la violencia machista no se vio afectada.

Desde la abogacía, en este año se ha mantenido la asistencia a las mujeres víctimas de violencia de género, asegurando así el asesoramiento al que tienen derecho, permaneciendo en estas fechas los abogados y abogadas al lado de las mujeres en todo el proceso que se inicia con la interposición de la denuncia.

Las 41 mujeres asesinadas en lo que va de año, suponen una disminución de las cifras de la vergüenza respecto al año 2019, pero no representa un alivio, ya que mientras exista una sola mujer asesinada junto a los 23 huérfanos, familias rotas, y asistamos al importante número de denuncias que registran nuestros juzgados no habremos resuelto este problema y no podemos bajar la guardia.

Mantenemos nuestras reivindicaciones al objeto de adecuar la legislación y acoger definitivamente los avances que en esta materia contiene el Convenio de Estambul, así como un desarrollo pleno del Pacto de Estado contra la violencia de género y la preceptividad de la asistencia letrada desde antes de interponer la mujer la denuncia.

Insistimos que es fundamental apostar por la educación en valores de igualdad y respeto porque, como la mejor de las herramientas para ir acorralando esta realidad.

Hacemos un llamamiento a la sociedad para que se convierta en un aliado contra la violencia de género y no la perciban con un problema que a ellos no les afecta. Todos tenemos que ser activistas en contra de esta lacra y es necesario que todos los operadores que trabajamos en esta materia pongamos todos nuestros medios y mostremos a la sociedad de forma común nuestra preocupación y unidad en la erradicación de esta lacra de nuestra sociedad, sin evitar si es preciso el análisis de posibles prácticas erróneas.

El compromiso de la abogacía es inquebrantable, y mientras llegue ese día, en el que podamos decir que de la sociedad ha desaparecido la violencia contra las mujeres, desde la Abogacía seguimos trabajando.