En este breve artículo, el abogado penalista Álvaro Escudero, especialista en delitos de violencia, te explica los tipos de malos tratos que existen y las características de cada uno de ellos.
Tipos de malos tratos en función de quién es agresor y víctima.
En función de quién es la persona que maltrata y la persona que lo sufre, encontramos los siguientes tipos de malos tratos.
Violencia doméstica.
La violencia doméstica comprende todos aquellos tipos de malos tratos que se producen en el ámbito familiar, excepto si el agresor es hombre y la mujer es víctima.
Dentro de este tipo de delitos, los más habituales son los actos de malos tratos de la mujer contra el hombre y los de padres y madres contra sus propios hijos. Sin embargo, también encontramos casos en los que son los hijos quienes maltratan a los padres, o violencia entre hermanos. En ocasiones, también se ven involucrados los abuelos, como víctimas o como agresores.
Violencia de género.
La violencia de género comprende los tipos de malos tratos que sufre la mujer, exclusivamente cuando son cometidos por su pareja o expareja hombre. Por tanto, si una mujer sufre malos tratos por parte de otra mujer que sea su pareja, no será violencia de género.
Violencia vicaria.
Comprende todos aquellos actos de maltrato, cometidos por un progenitor maltratador, contra los hijos. Ello siempre que se produzca con el objetivo de hacer daño a la madre de los mismos.
Síndrome de alienación parental.
Pinchando en este enlace, podrás leer uno de mis artículos donde explico el SAP (Síndrome de alienación parental) como forma de maltrato hacia el hombre.
El SAP es un tipo de maltrato habitual ejecutado por la mujer contra el hombre utilizando a los hijos, poniendo a estos en contra del padre de forma injustificada. El objetivo es doble: por un lado hacer daño al hombre utilizando a los hijos en común; por otro, hacer que el padre termine perdiendo la relación con sus hijos.
Actualmente, debido a intereses políticos y económicos de del lobby neofeminista, se niega su existencia. Sin embargo, quienes nos encontramos día a día en los juzgados, sabemos que es demasiado habitual.
Tipos de malos tratos: físicos y psicológicos.
Malos tratos físicos.
Comprenden aquellos delitos que causan un daño físico o corporal. Los ejemplos más claros que podemos encontrar son el asesinato y homicidio, el delito de lesiones, agresión y abusos sexuales y el delito de maltrato de obra (pegar sin causar lesiones).
El más habitual dentro de este tipo de malos tratos es el delito de lesiones, cuya condena dependerá de la gravedad de las mismas, pudiendo llegar a varios años de prisión si las mismas producen alguna deformidad.
Malos tratos psicológicos.
Comprenden aquellos delitos que no producen daño físico o corporal a la víctima, sino que provocan daño psicológico o mental.
Dentro de los tipos de malos tratos psicológicos, los más habituales son el delito de amenazas y el delito de coacciones.
En muchas ocasiones, podemos apreciar que los delitos psicológicos se banalizan, es decir se les resta importancia o se niega su existencia, sobre todo cuando son cometidos por una mujer contra un hombre.
Tipos de malos tratos puntuales y continuados.
Hay algunos delitos que, si se cometen durante un tiempo prolongado, no se juzgará cada hecho por separado, sino que se juzgará como un delito de malos tratos continuado.
Es decir: cuando se produce un hecho aislado de maltrato, se juzgará como tal. Si son varios hechos, prolongados en el tiempo, y del mismo tipo, se juzgará como un solo delito continuado. Ello significa que la condena será más alta que si fuese un solo hecho aislado y la prescripción comenzará a contar desde que se cesa el último de los episodios.
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