Abogada del Colegio de la Abogacía de Madrid, lleva 10 años de alta en el Turno de Oficio y su especialidad es la Penal. Cuenta que la experiencia en el Turno le ha aportado un rodaje especial  y que su mayor satisfacción es siempre el agradecimiento del cliente.

¿Cuándo y por qué decidió apuntarse al Turno de Oficio? 

Siempre he participado en voluntariados con diferentes organizaciones, ayudar y desarrollar mi vocación de servicio son mis prioridades. La elección de la abogacía como profesión fue vocacional y ejercer como abogado de Turno de Oficio lo veía como la posibilidad de poner mi formación, conocimientos y experiencia a disposición de las personas que no disponen de suficientes recursos económicos para litigar. Por ese motivo, en el mismo momento en que cumplí los requisitos de años de ejercicio y completé el correspondiente curso de acceso no dudé en inscribirme.

¿Qué caso de oficio le viene a la mente cuando repasa su trayectoria?

Quizás, de los casos que recuerdo todavía con mayor viveza es el relativo a un cliente al que se acusaba de usurpación por no desalojar la vivienda de alquiler cuando no se le renovó el contrato. Mi cliente era el cabeza de familia, con hijos menores, dos de ellos con patologías médicas graves, y la única opción que le ofrecían era irse a la calle. Tras arduo trabajo conseguí, además de la absolución en el proceso penal, la firma de un nuevo alquiler social, y con ello solucionarles esa situación tan angustiosa y facilitarles una solución definitiva del problema. Fue un momento muy conmovedor, de hecho, la emoción de aquel momento perdura en el tiempo y la guardaré bajo mi toga para siempre.

¿Qué le ha aportado como abogada su experiencia en el servicio público de Justicia?

Me ha dado la posibilidad de unir mis dos pasiones:  la abogacía y el servicio hacia los demás, especialmente de quienes tienen menos recursos económicos y no pueden designar un abogado particular para su defensa.

La experiencia como abogada de turno de oficio me ha aportado un rodaje especial por la propia coyuntura y situación de los casos que se designan. Pero quizás la mayor aportación haya sido a nivel personal y emocional: el agradecimiento del cliente y la propia satisfacción de ver cómo el resultado de tu trabajo contribuye a solucionar situaciones muy complejas, de gran carga emocional para el cliente y difíciles de gestionar por sus propias circunstancias personales.

 ¿Cómo cree que los clientes de la Justicia Gratuita perciben su trabajo? 

El feedback que he recibido de los clientes designados por Turno de Oficio es sumamente gratificante. En su mayoría me han manifestado estar muy satisfechos y agradecidos no sólo por el trabajo realizado, sino también por el trato recibido.

Yo sólo estoy adscrita al Turno Penal, y los momentos que uno vive junto al cliente desde el momento de la detención son de mucha intensidad, es necesario extraer en tiempo récord toda la información y prueba necesaria para su defensa, y cuando ven que te implicas 100% con su asunto, por regla general intentan corresponder con máxima colaboración y gratitud dentro de sus posibilidades.

¿Piensa que los casos en los que interviene un abogado de oficio reciben la misma atención por parte de los juzgados que el resto de casos?

No, no considero que haya diferencia de trato  o por lo menos yo no he percibido diferencia de trato alguna. En los Juzgados ya nos conocen, unas veces vamos designados como abogados particulares y otras con designa de oficio, y saben perfectamente que nuestro trabajo, esfuerzo y empeño es el mismo en uno u otro caso.

Además del tema de las remuneraciones, ¿Qué otras propuestas/medidas cree que deberían adoptarse para mejorar el servicio y el trabajo de los abogados que lo prestan? 

Considero fundamental el tema de la adecuación de baremos, pero también que se abonen todas las actuaciones, y todas las designas, con esto me refiero a las designaciones de oficio para personas jurídicas, además de medidas dirigidas a garantizar la conciliación y desconexión digital.

Debemos poner de relieve que teniendo en cuenta el aumento de las amenazas por clientes del turno de oficio hacia los compañeros designados para su defensa, es necesario que en tales designas tengan consideración de autoridad a efectos penales, como medida disuasoria y de protección hacia los letrados designados de oficio.

Además, quisiera poner de relieve la imagen devaluada que parece tener el abogado de oficio, es necesario que se promuevan campañas de sensibilización, que se acerque y se conozca el trabajo de los compañeros, todos con años de experiencia y formación especializada.