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Seguro que, en más de una ocasión, te has cuestionado la duración de un semáforo en rojo o el tiempo que tarda en cambiar de color. La Ley de Seguridad Vial, como en el Reglamento General de Circulación, no se especifica nada al respecto, por lo tanto, en la normativa aplicable no hay ningún tiempo fijado obligatoriamente.

No obstante, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha señalado que las fases de un semáforo, verde, ámbar y rojo, cuya duración sea inferior a 35 segundos o superiores a 150 segundos son difíciles de comprender por el conductor, por lo que no son aconsejables.

¿Cuánto dura un semáforo en rojo?

La duración de un semáforo en rojo puede variar según el lugar y la intersección específica. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el tiempo promedio de espera en un semáforo en rojo es de aproximadamente 60 segundos, es decir, un minuto. Este tiempo se ha establecido teniendo en cuenta diversos factores como el flujo de tráfico en la zona, el cruce de peatones y la sincronización con los semáforos cercanos para facilitar la circulación de los vehículos y el paso de los peatones que transitan por la zona.

Es importante destacar que la duración del semáforo en rojo puede ajustarse en ciertos momentos del día o en circunstancias especiales. Por ejemplo, durante las horas pico es posible que se aumente el tiempo en rojo para permitir una mayor fluidez en la vía principal. Del mismo modo, en zonas escolares o concurridas por peatones, el semáforo podría permanecer en rojo por más tiempo para garantizar su seguridad al cruzar la calle.

¿Cuánto tarda un semáforo en cambiar de color?

El tiempo que tarda un semáforo en cambiar de color varía dependiendo de la programación específica de cada intersección. El ciclo completo de cambio de luces en un semáforo generalmente consta de tres fases: rojo, ámbar y verde. El tiempo en cada fase puede ajustarse para adaptarse a las necesidades del tráfico local.

  • Fase roja: Como mencionamos anteriormente, la fase roja suele tener una duración aproximada de 60 segundos. Durante este tiempo, los vehículos afectados que ven de frente el semáforo o los peatones, en su caso, deben detenerse por completo para permitir el paso seguro de los otros usuarios de la vía, cuyo semáforo, se encuentre en verde o en ámbar.
  • Fase ámbar: La fase ámbar, también conocida como fase de precaución, tiene una duración breve, generalmente, de unos pocos segundos, entre 5 y 15 segundos. Su propósito es advertir a los conductores de que el semáforo cambiará a verde o rojo y que deben prepararse para detenerse o avanzar con precaución.
  • Fase verde: La fase verde es el momento en el que los vehículos tienen el derecho de paso y pueden avanzar de manera segura. La duración de la fase verde puede variar significativamente según el tráfico de la intersección, pero suele estar entre 30 y 60 segundos.

Es importante tener en cuenta que, en algunas intersecciones, especialmente en áreas de alto tráfico o en cruces importantes, se utilizan sistemas de control de tráfico inteligente. Estos sistemas emplean sensores y algoritmos para ajustar automáticamente la duración de cada fase del semáforo en función del flujo de vehículos y peatones, lo que optimiza la circulación y minimiza los tiempos de espera.

En conclusión, la duración del semáforo en rojo, generalmente, es de aproximadamente un minuto, aunque puede variar según la ubicación y las circunstancias específicas. Por otro lado, el tiempo que tarda un semáforo en cambiar de color depende de las fases programadas, que incluyen el rojo, amarillo y verde, con el propósito de regular el tráfico de manera eficiente y segura. La sincronización adecuada de los semáforos es fundamental para mantener el flujo de la circulación y mejorar la experiencia de conducción en las calles de las ciudades.

Multas por saltarse un semáforo en rojo

La infracción por rebasar un semáforo en fase roja se comete, tanto por superar el semáforo con la luz roja fija, no intermitente, como por rebasar la línea de detención anterior más próxima a aquél siempre que, dichas líneas, se encuentren pintadas en la calzada o incluso porque se haya reanudado la marcha antes de que la luz roja haya dejado de estar encendida.

En este sentido, hay que señalar que, no respetar la luz roja de un semáforo, es una infracción catalogada como grave y, por lo tanto, será sancionada con multa de 200 euros y la pérdida de 4 puntos.

Si esta misma infracción la cometería un peatón que cruza por el paso del semáforo cuando se encuentra en verde para los vehículos y en rojo para los viandantes, sería sancionado con multa de 200 euros, pero no con eliminación de puntos, puesto que la pérdida de puntos únicamente se producirá cuando el hecho se produzca por la conducción de un vehículo para el que se exija permiso o licencia de conducción.

Si tras esperar más de 5-10 minutos, el semáforo no cambia de color: ¿Qué opciones existen?

Es evidente que se trata de una anomalía, por lo que es importante que sea notificada lo antes posible al organismo titular de la señalización. Además, si queda constancia de dicha notificación mejor, ya que si, finalmente, el conductor superase el semáforo y fuese denunciado por ello, con esas pruebas es posible recurrir y demostrar el mal funcionamiento del semáforo.

No obstante, si el conductor no quisiese tener problemas con ninguna denuncia, podría esperar a que llegase la policía y le autorizase el paso. 

¿Me puedo saltar un semáforo en ámbar? Consecuencias

La legislación prohíbe rebasar el semáforo en fase ámbar, por ello, aquel conductor que llevase a cabo dicha acción también podría ser denunciado y sancionado.

No obstante, no sería infracción rebasar el semáforo en ámbar cuando al ponerse la luz amarilla el vehículo se encuentre tan cerca del lugar de detención que no pueda detenerse antes del semáforo en condiciones de seguridad suficiente.

Detección y denuncia de este tipo de infracciones

En la actualidad, es habitual que este tipo de infracciones sean detectadas por numerosas cámaras y sistemas de grabación que han instalado, principalmente, los ayuntamientos, que captan la secuencia del paso de los vehículos.

No obstante, también sigue existiendo la posibilidad de que la denuncia la formule un agente de la autoridad que pudiera apreciar el hecho e incluso, un agente de movilidad, un controlador o cualquier persona que, desease formular la denuncia a la vista de una presunta infracción.

Miguel Molina | Abogado de Legálitas

Referencias legales: 




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