Los datos del informe “Grado de integración de prácticas de Responsabilidad Social Empresarial en los/las profesionales autónomas/as y en las pequeñas empresas” realizado por la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) y subvencionado por la Direccion General de Trabajo Autónomo, han revelado que son muchos los autónomos que ponen en marcha acciones clasificadas dentro de la Responsabilidad Social Empresarial y no las tienen identificadas.
La gobernanza de los negocios debe estar alineada con las necesidades de nuestros trabajadores, tenemos que ser capaces de desarrollar nuestras actividades económicas en condiciones que ayuden al respeto del medio ambiente, y favorezcan la corresponsabilidad y el trabajo, digno además de implementar acciones dirigidas a los colectivos más vulnerables de nuestra sociedad.
El mundo del trabajo por cuenta propia es minifundista en el ámbito económico y en los recursos humanos que trabajan en él. Esta realidad es uno de los grandes desafíos que nos encontramos para desarrollar acciones concretas, pero eso no significa que no estemos absolutamente convencidos de la importancia de acometerlas.
La primera de las conclusiones obtenidas en el informe sería clarificar el propio concepto de Responsabilidad Social Empresarial adaptándolo a la realidad del trabajo autónomo, teniendo en cuenta tamaño de las empresas, ámbito en el que operan y actividad que desarrollan. En segundo lugar, la Responsabilidad Social en el Trabajo Autónomo no debería verse como un procedimiento, sino como un valor, una actitud de nuevos valores sociales.
También se deduce del estudio que habría que sensibilizar e informar a nuestro colectivo de los beneficios que genera la integración de prácticas socialmente responsables a través de acciones de divulgación, programas de formación y asesoramiento, además de fomentar, por parte de las administraciones públicas, la responsabilidad social empresarial en el trabajo autónomo.
Eduardo Abad presidente de UPTA, “tenemos que trabajar, y es responsabilidad también de las organizaciones de autónomos, para concienciar y sensibilizar a los trabajadores por cuenta propia y profesionales para que integren medidas socialmente responsables. Habrá que promover medidas que favorezcan esa visibilidad y que identifiquen a los trabajadores autónomos y micropymes que las desarrollan, es primordial para alcanzar una sociedad más comprometida. También es necesario dar visibilidad a esas acciones y propiciar entre todos una sociedad más responsable. La contribución de nuestro colectivo no puede pasar inadvertida ni quedarse atrás. Nuestra apuesta, en este sentido, se basa en la creación de un sello o certificado de cumplimiento de prácticas socialmente responsables en las pymes y micropymes, de cara a dar visibilidad y transparencia a la realización de esas prácticas.”
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