Barcelona, 24 ene (EFECOM).- Los empleados españoles aumentaron su salario un 8,8 % en 2023 respecto a un año antes, bastante por encima del de los directivos y los cargos medios, aunque no consiguieron recuperar poder adquisitivo en relación a 2007 como consecuencia de la galopante inflación.

Esta es la principal conclusión del informe "Evolución salarial 2007-2023", realizado por la consultora ICSA Grupo en colaboración con la escuela de negocios Eada y que se basa en los datos salariales de más de 80.000 empleados por cuenta ajena en España.

El estudio, presentado este miércoles en rueda de prensa, revela que el salario medio bruto de los empleados se situó el año pasado en 26.406 euros, un 8,8 % más que en el año precedente, y el de los directivos en 88.347 euros, un 3,29 % superior, mientras que el de los cargos medios fue de 43.062 euros, lo que supone una caída del 3,8 %.

Los cargos intermedios, los peor parados

El incremento del salario mínimo (SMI) y los convenios colectivos pactados contribuyeron a ese aumento salarial del 8,8 % para los empleados, según los autores del informe, que atribuyen el retroceso del sueldo de los mandos intermedios a "la amortización" que las empresas realizan de estas posiciones en tiempos inciertos y con fluctuaciones como la actual.

El director del área de estudios de ICSA, David Suárez, y el profesor de Eada Business School Jordi Asens han apuntado también hacia otro factor que explicaría en parte este fenómeno: el impacto de la Inteligencia Artificial (IA), que "aplana" las estructuras.

"Aunque aún no podamos cuantificar su relevancia, la IA ya está replanteando las funciones, las responsabilidades y la vigencia de un alto porcentaje de puestos de trabajo", ha subrayado Suárez.

El golpe de la inflación

Pese a que los sueldos de los empleados ha subido un 34,8 % desde 2007, la evolución de la inflación, que ha crecido un 36,1 % en este período, ha dejado el poder adquisitivo de los trabajadores de base por debajo del de hace 16 años.

El incremento acumulado del salario de los mandos intermedios (23,73 %) y de la dirección (28,59 %) también está por debajo del de la inflación en ese período.

Por sectores, la industria fue la que registró en 2023 los salarios más altos, con 30.171 euros, arrebatando la primera posición a las finanzas y los seguros, que se situaron en segunda posición (28.816 euros), seguidos de la construcción (24.564 euros), los servicios (21.933 euros), el transporte (20.966 euros), y el comercio y el turismo (18.154 euros).

Madrid y Cataluña, a la cabeza de los sueldos

Por comunidades autónomas, Madrid lidera los mejores sueldos en todas las categorías, seguida de Cataluña.

Así, los directivos percibieron 93.636 euros en Madrid y 90.322 en Cataluña, seguidos de Asturias (87.117 euros), mientras que La Rioja (75.455 euros) y Extremadura (76.542 euros) se ubicaron en la cola de esta categoría.

Entre los cargos directivos, los mejor pagados fueron los Madrid (45.640 euros), Cataluña (44.025 euros) y Asturias (42.462 euros), y La Rioja (36.778 euros) y Extremadura (35.846 euros) ocuparon también los últimos puestos.

Respecto a los empleados, Madrid lideró la lista, con 27.987 euros, y después Cataluña, con 26.996 euros, mientras que Navarra se situó en tercera posición (26.707 euros), y a la cola se quedaron   Extremadura (21.981 euros) y La Rioja (22.552 euros).

El documento también analiza los salarios en función de la dimensión de las empresas y concluye que en las más grandes los directivos vieron incrementar especialmente sus sueldos, hasta un 6,47 %, al tiempo que los mandos intermedios registraron una caída del 7,34 %.

El sueldo de los empleados aumentó más en la pequeña empresa (12,18 %) y en la mediana (12,34 %), que en la más grande (8 %).

En el actual contexto económico, dominado por la incertidumbre, los autores del informe han defendido un nuevo modelo de mejora de los salarios que no se base en incrementos lineales y se vincule más a la productividad.

"Necesitamos un modelo más sostenible y adaptable", ha dicho David Suárez, que ha apostado por utilizar más retribuciones variables, complementos extrasalariales -seguros médicos o ayudas para guardería-, el teletrabajo o las carreras profesionales.