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La atención médica del proceso de gestación, que corresponde a la obstetricia, es especialmente delicada y compleja. Comprende un seguimiento doble: el de la embarazada y el del niño que se está gestando. Sus complejidades hacen que la obstetricia sea una rama de la medicina muy expuesta a negligencias médicas.

Desde el momento mismo del diagnóstico hasta el alumbramiento y parto, ocurren transformaciones estructurales tanto en la madre como en el niño. Esta área de la medicina es una de las que más protocolos posee, que establecen cómo debe actuar el obstetra o las personas de su equipo en cada tipo de situación o de complicación detectada.

Las consecuencias de los errores médicos pueden provocar secuelas para el niño y su madre y daños morales para la familia. A este impacto se agrega la probable necesidad de tratamientos de rehabilitación de duración diferente. En atención a estos perjuicios y a otros que dependerán de cada caso, se puede reclamar indemnización en caso que se compruebe una negligencia médica. Siempre para estas reclamaciones lo mejor es buscar el asesoramiento de un buen abogado especialista en negligencias médicas.

¿Cuáles son algunos de estos posibles errores?

Los errores médicos en obstetricia pueden ocurrir en cualquier área del equipo que atiende a las embarazadas. Pueden tener su causa en las políticas de la institución, en la burocracia o en errores humanos del personal. Es importante tener en cuenta que un error médico no siempre constituye una negligencia.

Algunos de los errores médicos más nombrados relacionados con la obstetricia incluyen:

Diagnóstico tardío

El embarazo debe ser atendido desde el primer momento, cuando comienza la gestación. El diagnóstico oportuno permite prevenir complicaciones durante el proceso de desarrollo del niño y en el nacimiento, especialmente en caso de mujeres que tienen enfermedades crónicas, como la hipertensión o la diabetes. Un diagnóstico tardío de embarazo es un error médico que puede tener graves consecuencias.

Uso de instrumentos de parto

En ciertos partos se requieren instrumentos que ayudan al nacimiento, como fórceps, espátulas, ventosas. Si son utilizados de manera incorrecta, pueden provocar complicaciones, especialmente al bebé. Algunas lesiones del mal uso de estos instrumentos son hematomas en el cuero cabelludo, fractura de cráneo, parálisis de los nervios faciales y hasta daño cerebral.

Retraso en la realización de una cesárea

La demora injustificada en la decisión de realizar una cesárea en casos de dificultad en el parto, puede llevar a traumatismos en el bebé. Una disocia en el parto que no es atendida a tiempo puede provocar la asfixia perinatal, daño cerebral e incluso la muerte del bebé.

Maniobra de Kristeller

La Maniobra de Kristeller consiste en empujar al bebé con el brazo realizando movimientos que intentan favorecer el nacimiento. Algunas consecuencias de este procedimiento son la parálisis de hombros, la fractura de costillas, hemorragias y otros traumatismos tanto en la madre como en el bebé.

La Organización Mundial de la Salud y el Ministerio de Sanidad aconsejan evitar esta maniobra, y, si es imprescindible realizarla, solo ponerla en práctica después de que la cabeza del niño ya está encajada en el canal de parto.

Errores en la detección de anomalías fetales

La falta del diagnóstico temprano de anomalías fetales puede llevar a problemas graves en el momento del nacimiento ante la falta de precauciones necesarias para el caso.  Estos errores pueden ocasionar secuelas en el bebé.

Otros errores médicos relacionados con la obstetricia

Errores en la administración de anestesia en el momento del parto, de coordinación entre el personal que actúa en el nacimiento, alta prematura, inducción al parto antes de tiempo son otros errores que se cometen con cierta frecuencia.

¿Todos los errores médicos relacionados con la obstetricia son negligencias?

No todos los errores médicos se consideran automáticamente negligencias. El concepto de negligencia médica conlleva dos requisitos:

  • Un profesional de la salud no cumple con los protocolos y estándares de actuación establecidos para la situación.
  • Como consecuencia de estos errores de procedimientos se producen daños al paciente.  Es decir que existe una relación causal entre las lesiones y la actuación del profesional.

En el ámbito de la obstetricia, la naturaleza especialmente vulnerable de la situación de gestación hace que los errores médicos frecuentemente tengan consecuencias en la salud de la madre o del bebé. No solo consecuencias físicas, sino que también existen daños psicológicos que pueden derivar en mucho tiempo de sufrimiento para la familia.

En caso de sospecha de negligencia en parto, la ley reconoce al perjudicado o a sus familiares el derecho a reclamar una indemnización o, incluso, a denunciar penalmente a quien la cometió.  

¿Cómo se demuestra una negligencia médica en obstetricia?

Como en toda situación de denuncia por negligencia médica, es necesario demostrar que las lesiones de la madre o del bebé fueron ocasionadas por un error médico.

El historial clínico de la madre y del recién nacido siempre son documentos valiosos. También es recomendable registrar por escrito todas las lesiones sufridas y solicitar al centro médico documentación que las certifique.

En casos en que sea necesario demostrar negligencia vinculada con la obstetricia, el informe pericial desempeña un papel fundamental. Es un documento en el que se analiza el estado de salud de la madre y de su hijo en relación con la actuación y la atención que recibieron de parte del equipo médico.

El perito tiene las competencias que lo habilitan para identificar errores médicos y atribuirles las consecuencias en los pacientes, si las hubo.

¿Existen plazos legales para denunciar casos de negligencias vinculadas con obstetricia?

La ley establece plazos para demandar a personal médico o a los centros de asistencia cuando existe sospecha de negligencia médica.

  • Si los errores médicos que produjeron daños se produjeron en un centro asistencial privado, el plazo es de 5 años desde la estabilización de las lesiones.
  • Si la supuesta negligencia ocurrió en un centro público, el plazo para la reclamación ante la Administración Sanitaria es de un año.

Los casos de reparación de errores médicos relacionados con la obstetricia suelen ser complejos. Generalmente, las personas que reclaman sufren estrés y no saben cómo actuar. Su problema personal ocupa todo su tiempo y su pensamiento y necesitan de asesoramiento para decidir qué harán.

 




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