Uno de los accidentes que se producen con mayor frecuencia en la sociedad –así como de los más desconocidos– es aquél que se produce viajando en transporte público. De esta manera, y ante la desinformación existente al respecto, es habitual que aquellas personas que sufran un incidente en este tipo de medios se pregunten qué hacer en caso de sufrir lesiones, golpes o daños morales derivados del percance.

En este sentido, desde reclamador.es vamos a explicarte qué puedes reclamar, cómo y ante quién si has sufrido un accidente viajando en uno de los transportes públicos más utilizados en nuestro país: el metro. Descubre en este post más información sobre indemnizaciones por accidente en el metro.

¿Puedo lesionarme viajando en metro?

Sí. Pese a lo que pueda creerse, sufrir lesiones viajando en metro es algo habitual. Produciéndose estas, no solamente dentro del propio vagón del tren, sino también, en las instalaciones y andenes del subterráneo. Caídas a causa de agua en el pavimento o un mal estado del mismo, frenazos de las escaleras mecánicas o compuertas mal cerradas. Estos son algunos ejemplos por los que un usuario puede verse envuelto en un accidente en el metro. 

En cualquiera de los casos, los viajeros tendrán derecho a reclamar una indemnización derivada de los daños que se hayan podido producir con motivo del incidente. 

¿Qué pasa si tengo un accidente en el metro?

Si has sufrido un accidente viajando en metro, es recomendable que sepas que podrás reclamarlo siempre que éste haya derivado en alguna lesión, daño o padecimiento, independientemente de su gravedad. Y es que, la empresa de transporte debe hacer frente, en cualquier caso, a los gastos generados por accidente. Tanto de los leves como los de mayor grado.

El billete o ticket de metro: clave a la hora de reclamar

Generalmente, todos los usuarios que viajan en metro lo hacen utilizando una tarjeta de transporte o un billete sencillo, que puede expedirse en las máquinas u oficinas de las distintas estaciones del subterráneo. En cualquier caso, cuando un viajero paga por cualquiera de estos documentos, obtiene de forma automática un seguro, incluido en el propio ticket. Se trata del Seguro Obligatorio del Viajero (SOV).

El SOV, por tanto, obedecerá a la contratación de una empresa aseguradora que trabaja con la de transporte; cubriendo las posibles indemnizaciones por lesiones que puedan ocurrir, así como la asistencia médica requerida en caso de accidente.

Habitualmente, este seguro ofrece una cobertura incluso cuando el incidente no ha sido ocasionado a consecuencia de la negligencia o falta de pericia del conductor o personal del metro.

Pasos para reclamar un accidente en metro

Lo más importante para poder reclamar una indemnización derivada de un accidente en metro, es poder demostrar que fuiste víctima del incidente.

Para ello, será de especial interés:

1. Guardar el billete o tarjeta de transporte utilizada.
2. Fotografiar el lugar de los hechos,
3. Contar con un parte médico y/o policial en caso de haber sido necesaria una presencia sanitaria o de seguridad en el metro.
4. Observar si ha habido testigos.

Todo ello, facilitará la emisión de un atestado del accidente.

Una vez recopiladas las pruebas, existirán dos vías por las que reclamar:

• Vía civil. Esta la más habitual.
• La vía penal. Sólo se recomienda en caso de que el accidente haya derivado en padecimientos graves o fallecimientos. En cualquier caso, es aconsejable contar con la ayuda de un profesional en la materia. El experto te asesorará en caso de dudas o complicaciones en el proceso de reclamación.

Cálculo de las indemnizaciones por accidente en el metro

Para calcular qué indemnización podrás reclamar en caso de haber sufrido lesiones o daños como consecuencia de un accidente en metro, será necesario atender al Baremo de Accidentes de Tráfico. En este baremo, se establecen distintos puntos  en función de cada lesión y su posible agravante. Además, se especifican las cantidades económicas correspondientes a los días de baja o a aquellos en los que el perjudicado no haya podido realizar sus tareas habituales con normalidad.