El pasado 21 de diciembre se presentó en la sede de Mutua Madrileña el libro ‘Claves de la investigación en redes sociales’, una obra de la que es autora Silvia Barrera en la que aporta su visión personal y su experiencia fruto de diferentes investigaciones policiales, y que cuenta con la participación, entre sus autores, de expertos en ciberseguridad, policías y juristas, como Jorge Morell, David Maeztu, Esther Arén, Deepak Daswani, Félix Brezo o Jorge Bermúdez, entre otros. 

Silvia Barrera forma parte de un elenco de inspectores de la Policía Nacional que mide diariamente el pulso de los delitos tecnológicos. Su experiencia es fruto de un intenso trabajo en la Unidad de Investigación Tecnológica y a través de su blog “Ciudad sin Ley” nos permite conocer una parte de la actividad que desempeña como Inspectora de la Policía Nacional.

Una policía convertida en escritora, en autora de un libro sobre redes sociales, rodeada de referentes en ciberseguridad. Silvia, ¿cómo surge la idea del libro y qué queréis comunicar con él?

Digamos, mejor, una escritora convertida a policia ;).

Soy de las que piensan que cuando se viven momentos y experiencias únicas, se deben contar.

Cuando me puse a pensar cómo debía enfocar la obra, me agobié. Era mucha información, alguna de ella técnica y jurídica y trasladarlo a un lenguaje divulgativo para tratar de llegar al máximo número de personas es complejo. Había días que me levantaba de la silla con dolores de cabeza terribles pensando: “Esto no sé cómo explicarlo de forma sencilla”, es imposible. Lo dejaba para el día siguiente y volvía a empezar.

Las redes son un instrumento necesario es nuestras vidas, pero hay que saberlas usar y conocer cómo funcionan. Ese desconocimiento nos puede pasar factura y quise explicarlo de forma rigurosa y sencilla basándome en toda mi experiencia.

Recurrí a la colaboración de todos estos profesionales porque su visión es necesaria. Hay que enfocar el problema desde diferentes puntos de vista y poner de manifiesto que los problemas son comunes y no se trata del único argumento de una “madera”. 

¿Cómo ha sido la colaboración con tantos expertos sobre ciberseguridad para la redacción del libro?

Muy buena. En cuanto los llamé, estuvieron encantados de colaborar en un proyecto así y aportar su experiencia. Además, me ha servido para conectar con personas que ven las redes desde diferentes puntos de vista y para aprender mucho de ellos. ¡Todo está en el libro!

Silvia, has comentado en varias ocasiones la necesidad de contar con una legislación que contemple el fenómeno de las redes sociales, ¿contamos con una legislación suficiente para hacer frente a todos los problemas que surgen? ¿qué recomendaciones darías a nuestro legislador?

Respeto las opiniones que hay al respecto, pero mi experiencia me dice que la legislación está parcheada y contempla vacíos legales que provocan que las investigaciones acaben siendo carne de archivo, dispersas por los diferentes juzgados o en instancias superiores a la espera de determinación de competencia del Juzgado. Y los plazos, son excesivos. Acosos que se esclarecen un año más tarde, titulares de conexiones IP que ya no tienen un titular porque ha pasado un año desde la conexión y no se conservan los datos, redes sociales cuyos términos y condiciones están por encima de la legislación estatal, etc.

En otros países existe una legislación específica para determinados delitos tecnológicos y creo que en España se ganaría mucho introduciendo medidas procedimentales de este tipo, no sólo tipificando delitos, es decir, convirtiendo ciertas conductas en delito.

Al legislador le pediría que escuche a los que trabajan en esta materia y que cuenten con su colaboración. Una colaboración multidisciplinar. Es curioso que cuando se forman las Comisiones de trabajo o estudios sobre competencias tecnológicas, no se cuenta con la necesaria experiencia de los investigadores del cibercrimen. Hay mucho experto por ahí y muy pocos los que trabajan directamente en ello. Curioso.

Los comentarios privados con las redes sociales han pasado a una dimensión pública, incluso, con la potencialidad de viralizarse, ¿han cambiado las redes sociales a las personas o, por el contrario, las redes sociales nos dejan ver cómo es realmente nuestra sociedad? 

Creo que lo más bonito de las redes sociales es que nos muestran tal y como somos. Si tuviera que hacer una selección de personal para determinados puestos, sería lo primero que analizaría. Y la entrevista para el final.

¿Qué primeros consejos básicos darías a alguien que está siendo acosado o amenazado a través de redes sociales?

Que no intente arreglar las cosas por su cuenta ni negociar o interactuar con los presuntos autores. Segundo. No borrar ninguna evidencia electrónica ni advertir al autor de que va a ser o ha sido denunciado. Acudir a un perito forense y a un abogado. Intentar eliminar las cuentas de los presuntos autores (lo más probable) reportando esos perfiles a la red social y, por último, denunciar, si se quiere o se necesita saber quién está detrás de los hechos.

Desde tu perspectiva práctica, ¿cuál es la valoración que haces sobre las figuras del agente encubierto y del registro remoto?

Hablando de redes sociales…;) El agente encubierto es una medida necesaria que se ha aprobado 20 años más tarde de lo que se hizo en Estados Unidos y con unas reticencias absurdas de quien no conoce realmente la utilidad de esta medida. El acceso remoto a dispositivos, concebido bajo los principios forenses de la prueba electrónica es inviable. Se regulan medidas que no se conocen ni se pueden aplicar con las limitaciones jurídicas que se imponen a todos los procesos en nuestro país. Se habla de ellas en todas las charlas y no se aplican, curioso. La teoría es muy bonita.

¿Encuentra la policía muchas trabas o dificultades en su relación con los jueces debido a la complejidad de esta materia o a lo rápido que evoluciona la tecnología?

Mis compañeros, no lo sé, me consta que sí, pero yo sí, muchas. Solo recuerdo un proceso de las decenas que he instruido en las que la Autoridad Judicial tuvo en cuenta nuestro criterio y la investigación fue un éxito.

¿Cuáles son las principales dificultades con que se encuentra la policía en la investigación de delitos telemáticos?

Los que comentábamos antes. Principalmente, procesales. Siempre he abogado por la posibilidad de integrar los medios y la experiencia de la empresa privada en unos grupos de trabajo en conjunto con las autoridades policiales y el Fiscal. En Alemania se hace de esta manera y es una garantía de éxito.

Nosotros ya tenemos nuestro ejemplar de “Claves en la investigación en redes sociales”, no pierdan la ocasión y regálenselo en estas fechas, no les defraudará.