Madrid, 26 oct (EFE).- Un centenar de efectivos buscan a un anciano desaparecido en la Casa de Campo de Madrid, sin embargo la tecnología es la primera en dar con él. El sistema "Acompáñame", integrado en la aplicación móvil del Ministerio del Interior Alertcops, emplea señales wifi para obtener las coordenadas de desaparecidos que pudieran estar en riesgo. 

Este sistema pionero en el mundo y que Interior ha puesto a prueba este jueves en un simulacro de búsqueda de desaparecidos pretende que las intervenciones sean más rápidas y efectivas, especialmente cuando son en terrenos complejos.

"Es digitalizar la búsqueda más tradicional, visual y con el olfato de los guías caninos. Dar a los equipos de rescate unas coordenadas con tan poco margen de error ahorra trabajo y permite una intervención más rápida, porque el tiempo en estos servicios es oro", ha explicado en declaraciones a EFE el responsable de Alertcops, Francisco Alonso.

El planteamiento del simulacro es claro: un hombre de más de 70 años y con sus capacidades cognitivas afectadas se ha desorientado en uno de sus habituales paseos por la Casa de Campo y al ver que no vuelve a casa, su hija interpone una denuncia por desaparición.

Inmediatamente, bajo la premisa de que "las primeras horas son las únicas horas", las autoridades activan el dispositivo de búsqueda.

Los agentes de la Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Municipal de Madrid han realizado batidas por tierra y aire -a pie, a caballo, en vehículos, con drones y guías caninos- y, cuando llevaban cerca de una hora, una alerta ha saltado en los ordenadores del puesto de control avanzado.

Uno de los dispositivos receptores que llevan los agentes, los perros o los drones ha captado la señal wifi que emitía el teléfono del desaparecido, lo que ha permitido dar con sus coordenadas con un margen de error de unos tres metros.

En pocos minutos, el helicóptero del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de Navacerrada ha logrado evacuar al supuesto anciano -que en realidad era uno de sus compañeros- hasta el lugar en el que esperaba una ambulancia del SAMUR-Protección Civil para atenderle.

El sistema "Acompáñame" es especialmente útil para las intervenciones de los servicios de rescate en montaña, pues suelen ser en terrenos extensos y con zonas de difícil acceso.

"Lo que más nos limita es el terreno, y eso condiciona el tiempo. Si podemos buscar en menos espacio, mejor, sobre todo para llegar a la persona desaparecida y atenderla lo antes posible", ha destacado a EFE Juan Manuel Airas, uno de los miembros del GREIM que ha participado en el simulacro, quien recuerda búsquedas de semanas de duración que tal vez esta herramienta hubiese podido acortar.

La puesta a prueba de "Acompáñame", ha valorado Alonso, ha sido positiva a pesar de algunos fallos en la cobertura, por lo que espera que esté implementada y a disposición de toda la ciudadanía antes de que acabe el año.

Bajo la mirada internacional

El simulacro forma parte de un seminario de buenas prácticas en la búsqueda de personas desaparecidas organizado por el Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES) con motivo de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea.

En él han participado cerca de 70 especialistas de los cuerpos de seguridad de Estados Unidos, Chile, Perú, Italia, Francia o Países Bajos.

La directora del CDNES, teniente coronel de la Guardia Civil Pilar Muniesa, ha subrayado que el simulacro es un ejercicio "completamente irreal" por el lugar de la desaparición y las condiciones de búsqueda, cuyo objetivo es mostrar a sus homólogos "las capacidades y la coordinación de los cuerpos de seguridad españoles" ante estas situaciones.

Desde la creación del Centro en 2010, en España se han registrado 270.093 denuncias por desaparición, que han tenido una tasa de resolución del 94,7 %. Solo el pasado año hubo 26.003 casos.

Muniesa ha asegurado que el CNDES tiene el foco puesto en reducir la cifra de desapariciones entre los grupos más vulnerables: los menores de entre 13 y 17 años y las personas mayores con enfermedades degenerativas o mentales.