Emprender es una experiencia transformadora. En cada nuevo proyecto te retas a ti misma. De repente surge una idea y la vas hilando hasta lograr materializar tu sueño. Alimentas esa idea con voluntad, esfuerzo, abundantes dosis de ilusión y optimismo, conocimiento y buscando las alianzas que te ayuden a lograrlo. En este contexto de confluencia de complejidades, las redes de talento e innovación son el motor de la creatividad y del crecimiento empresarial. Se me hace difícil visualizar un futuro proyecto sin contar con aliados de confianza con quienes compartir valores y visión.
Lidia Codinachs |
En mi experiencia como emprendedora he aprendido que elegir a las personas, los equipos y los socios de negocio es algo importante. Rodearse de gente competente, leal y altamente resolutiva, es una fortaleza, un pilar sólido para el éxito de todo proyecto.
Quiero ser sincera y realista contigo, te confieso que no siempre se logra alcanzar el éxito, a veces se fracasa y te equivocas, pero eso también te enseña y te cambia. Siempre que interpretes un tropiezo como un aprendizaje para mejorar y optimizar tus capacidades, tu forma de proceder, tus elecciones, estarás en la vibración de encontrar una nueva oportunidad.
Soy de las que creen que cuando las cosas no resultan como esperabas, ahí hay un mensaje sutil que debes descodificar para comprender y superar. A veces, esos “tropiezos” hablan más de ti que de las causas con las que intentas justificar tu fracaso. Una buena amiga, a menudo me lo recuerda, “Cuando emprendes, creces. Algo de ti se remueve, se desvela y también se va, si te enfocas bien y te sabes manejar con los recursos necesarios, lo consigues y te desarrollas, te expandes e inexorablemente te superas”. Ella es alguien a quien aprecio y admiro, una aliada excepcional, alguien en quien se puede confiar y más que mudar de piel y adaptase a los cambios, transmuta sabiamente y se reinventa sin perder su esencia, alguien con quien disfruto trabajando y compartiendo nuevos retos, mi querida socia en Women Evolution, Maria Freiria.
Con María, con Laia Soriano, otro talento del equipo de “WE” como uno de mis “fundamentales” en este proyecto y Pere Ranera, nuestro tercer socio ejecutivo que desde siempre ha apoyado los proyectos que he emprendido, creamos en el 2019 Women Evolution. Me siento orgullosa del trabajo y de los resultados, pero sobre todo de las innumerables vivencias de aprendizaje que me ha regalado este maravilloso proyecto. Espero que la próxima edición de “We Barcelona” el 6 de octubre, logre despertar tu interés y por qué no, tu motivación para emprender ese proyecto en el que siempre has estado pensando. ¡Anímate! Hemos creado un panel para visibilizar y apoyar el talento de las emprendedoras.
Por aportar algunos datos sobre el Emprendimiento en España, Ana Fernández Laviada, presidenta del Observatorio de Emprendimiento en España, comentó en la presentación del último Informe GEM 2021-2022 que por primera vez a nivel nacional, el porcentaje de mujeres involucradas en iniciativas emprendedoras de menos de tres años y medio de vida (5,6 %) es superior al de los hombres (5,4 %), y aumenta en todas las fases del proceso de emprendimiento. No obstante, el mismo informe también concluye que hay un 50% menos de iniciativas de medio y alto valor tecnológico lideradas por mujeres que por hombres, lo cual sigue suponiendo una importante brecha en el emprendimiento de alto valor añadido, que requiere de actuaciones y políticas específicas.
Debo decir que conozco mujeres emprendedoras realmente exitosas, me sorprende su valentía, preparación y persistencia cuando todo parece ir a contracorriente para nosotras. Y a pesar de la abundancia de talento femenino, de los magníficos proyectos de innovación, conectados a las tendencias disruptivas en tecnología e inteligencia artificial, todavía hoy, hay demasiadas brechas de género que desequilibran el juego de las oportunidades para las emprendedoras en el tablero de la microeconomía global. A las emprendedoras que leáis este artículo os digo, haced la lista de lo que se puede mejorar para que más mujeres se animen a emprender, no os cortéis, debemos tomar la iniciativa y ser propositivas, reivindicar aportando soluciones viables y hacer seguimiento de su cumplimiento. Si queremos cambiar el paradigma empresarial, tenemos que lograr integrar más emprendedora con talento.
Como decía, el emprendimiento te transforma porque te hace ver también lo invisible, esas cosas que una sólo llega a conocer y las vive cuando toma contacto con los aspectos más duros de la aventura de emprender: discriminación, desigualdad, sesgos de género, entre otros. Por ello siempre he creído en el poder de las redes de mujeres profesionales, compartir conocimiento y sumar juntas entre emprendedoras, directivas y empresarias creo que es un formula muy necesaria para liderar los nuevos retos, para confrontar juntas esas brechas y paso a paso conseguir erradicarlas.
Las mujeres cuando nos unimos en una causa común, somos imparables y si además vamos acompañas de hombres cómplices que creen en la igualdad y la diversidad y nos ayudan a lograr vencer los desequilibrios, aún vamos más lejos. Una de esas redes profesionales en las que tengo el honor de formar parte es la Asociación de Mujeres Directivas, Empresarias y profesionales de Sant Cugat del Vallès, la ciudad en la que vivo y desarrollo gran parte de mi actividad profesional. Este año recibo con gran ilusión e inmensa gratitud el Premio a la Creatividad de ADE Vallès 2022, un galardón que recogeré con humildad y esperanza, pues sé lo que se siente cuando la sororidad se hace eco y llega el reconocimiento de una, como el de totas al mismo tiempo.
Esperanza porque las emprendedoras no estamos solas, hay caminos por recorrer con muchas otras mujeres que cada día deciden arriesgarse a emprender. En este post he compartido contigo, esa persona que lees estas letras, mi experiencia transformativa como emprendedora. Permíteme hacerte una invitación, atrévete a emprender, descubre la enriquecedora oportunidad que se presenta ante ti cuando comprendes el verdadero significado de emprender, te transforma.
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