“España proyecta hoy una imagen de inseguridad jurídica y debilidad institucional. Vivimos una crisis sin precedentes que se compone a su vez de otras crisis como una crisis sanitaria, en la que los ciudadanos han visto como prevalecían los intereses políticos sobre los de la salud pública, además de la improvisación, arbitrariedad, negligencia y la dejación de responsabilidades políticas, que han creado una desconfianza de los ciudadanos en las instituciones, además de una crisis económica que está provocando que miles de familias pierdan su trabajo”. Con esta rotundidad se manifestaba Manuel Pérez-Sala, presidente del Círculo de Empresarios, durante su intervención en una nueva edición del Foro Justicia ICAM celebrado esta mañana en la sede del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, en un acto patrocinado por la editorial Tirant Lo Blanch.
El evento ha contado con la bienvenida del decano del Ilustre Colegio de Abogados, José María Alonso, además de la presentación de Isabel Dutilh Carvajal, presidenta del Grupo de Trabajo de Seguridad Jurídica del Círculo de Empresarios y la moderación de la periodista Verónica Sanz.
Según el presidente del Círculo de Empresarios, esta crisis “es también una crisis política y moral en la que ha prevalecido los intereses personales y partidistas a los generales, y un deseo de perpetuación en el poder, además de una crisis institucional acrecentada por un Gobierno en permanente contradicción que trata de acaparar todas las esferas de poder y que se cuestiona sin pudor el marco constitucional que sustenta nuestros derechos y libertades”.
En este contexto Pérez-Sala ha remarcado que se está produciendo un enorme deterioro de la confianza de los ciudadanos en políticos e instituciones, donde más de un 90% de los ciudadanos desconfía de los políticos y partidos políticos según las encuestas, y más de un 70% desconfía del Gobierno, mientras algunos menos, una ligera mayoría, desconfía de resto de las Instituciones por la falta de capacidad de nuestra sociedad para llegar a grandes acuerdos en beneficio del conjunto de la sociedad.
Situación política e institucional en España
El presidente del Círculo de Empresarios también se ha referido a la situación política e institucional que ha vivido España por la crisis sanitaria del Covid-19. “Los ataques a las instituciones esenciales están siendo continuos y comienzan por un ataque a la historia más reciente de este país: la historia de Transición a la Democracia. Estamos en una situación en la que al Parlamento se le dificulta ejercer sus funciones, hemos vivido en un Estado de Alarma que más bien parecía un Estado de Excepción, donde se legislaba por procedimientos de urgencia, sin debate parlamentario, y donde se ignoraban las recomendaciones del Consejo de Estado con normas cuyos preámbulos usaban frases para acusar a políticos de deslealtad”.
Los indultos a los presos del procés
Manuel Pérez–Sala también ha dejado clara la posición del Círculo de Empresarios frente a los indultos recientemente concedidos por el Gobierno a los presos del procés catalán. “La situación de Cataluña es muy delicada. En el seno del Círculo de Empresarios no estamos a favor de estos indultos porque deberían cumplir requisitos previos, entre ellos la renuncia de los condenados a cometer los mismos delitos. Tenemos que tratar de integrar Cataluña en el resto de España porque no es bueno para la sociedad española que las empresas abandonen Cataluña. La otra parte tiene que dar un paso y renunciar cualquier vía no constitucional”.
Según afirma, es urgente que la política recupere el diálogo y los ciudadanos actúen. “Los españoles tenemos la oportunidad y obligación moral frente a las generaciones futuras de no permitir el deterioro institucional. Las instituciones deterioradas han alimentado en muchos países el populismo”.
Recetas para salir de la crisis
Manuel Pérez–Sala, también ha resaltado a lo largo de su comparecencia que “la Unión Europea nos ofrece un programa de recuperación, transformación y resiliencia con el que podemos contar con fondos para llevar a cabo las reformas que necesitamos acometer. No podemos desaprovechar esta oportunidad”. En este sentido, ha recomendado vacunar masivamente y llevar a cabo reformas estructurales en cinco ámbitos destacados: las pensiones, las Administraciones Públicas, la educación y el sistema impositivo. “Debemos recuperar la calidad de las instituciones, y reducir el déficit y deuda pública. Son muchos los riesgos que nos amenazan, nuestra recuperación no es sólida, las variantes del virus pueden amenazar este periodo”, declaraba destacando que “los 140.000 millones de euros que vienen de Bruselas son una gran responsabilidad. 70.000 millones son un préstamo que hay que devolver, y el resto son millones a fondo perdido de los que tendrá España que sufragar una parte. Nos hubiera gustado que se constituyera una agencia independiente para controlar estos fondos, pero por voluntad del Gobierno no ha podido ser. Es por ello que pedimos al Ejecutivo que use estos fondos bien, evitando cualquier tipo de clientelismo”.
El decano también se ha referido con preocupación a esta cuestión, “los mejores cerebros de este país deberían estar en la toma de decisiones sobre los fondos de la UE. Tenemos que escuchar a quiénes generan empleo”, advertía.
Crítica a las medidas económicas del Gobierno
El presidente del Círculo de empresarios ha querido dejar clara su disconformidad con las propuestas del Gobierno para reflotar la economía española: “El Ejecutivo ha planteado, de acuerdo con los Agentes Sociales, tres grandes grupos de medidas referentes a los gastos de la Seguridad Social, los Presupuestos Generales del Estado y la prohibición de la jubilación anticipada”, soluciones claramente insuficientes de acuerdo al conferenciante, que abogó por retrasar mucho más la edad de jubilación, “las medidas que está aprobando el Gobierno son tendentes a cubrir sus necesidades durante dos años, pero no suponen reformas estructurales profundas. Estamos sugiriendo implantar un sistema de cuentas como en Suecia. Esto lo vamos a defender en el Pacto de Toledo, matizando a su vez que “la solución de incrementar las pensiones con el IPC nos llevaría a una deuda pública del 170%, algo absolutamente insostenible”.
Pérez-Sala también ha mostrado su rechazo a la propuesta del Ejecutivo de subir el salario mínimo interprofesional. “A nosotros nos gustaría que los ciudadanos españoles tuvieran un sueldo más amplio. Pero en un país con casi un 20% de paro, la subida del salario expulsaría del mercado laboral a una enorme cantidad de ciudadanos y hay que mirar las cifras del Banco de España. 170 mil personas han perdido su empleo por culpa de la subida del salario mínimo. Mientras que tengamos este nivel de desempleo hay que ser muy prudentes. Ahora es el momento menos adecuado para plantearse subidas”.
La abogacía como motor de impulso económico
El Decano del Colegio madrileño, José María Alonso ha destacado que parte de estos fondos europeos deberían tener como destinataria a la Administración de Justicia. “Da la sensación de que ha sido el patito feo, parece que invertir en Justicia no da votos, pero los inversores extranjeros valoran sobre todo la seguridad jurídica y el funcionamiento de Tribunales, espero que el Gobierno sea consciente de ello”.
José María Alonso también ha hablado sobre el importante papel que tiene la abogacía para ofrecer un impulso económico que alivie la crisis en la que nos encontramos. “Es un momento en el que todos debemos luchar por la defensa de las instituciones. La abogacía está inmersa en el mundo de la economía y los abogados tenemos que hacer un papel muy importante. Para los profesionales de la abogacía, el mundo empresarial es fundamental, no sólo porque ahí están una buena parte de nuestros clientes, sino porque tenemos mucho que aprender de él”. Una afirmación en la que coincide Manuel Pérez-Sala: “la unión de empresa y abogacía es fundamental, hay que respetar las normas y, como consecuencia, esta simbiosis entre abogados y empresarios es necesaria”.
El presidente del Círculo de Empresarios no ha querido despedir su intervención sin dar un cierre optimista, aunque cauto, de cara a la crisis económica y su recuperación, “creo que la ilusión es buena en la medida en que anime a los Agentes Sociales a potenciar la recuperación. Creo que nuestra economía se recuperará a finales del año que viene, pero, hasta que el turismo no esté de nuevo a pleno rendimiento, la economía española no se reactivará. Tenemos 200 mil empresas al borde de la quiebra que debemos que salvar en los próximos meses”.
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