Noticia muy actual sobre educación. Dos hermanas con discapacidad están escolarizadas en centros separados. Una con un 48% de discapacidad y grado II dependencia, otra con un 36% de discapacidad y grado II dependencia. Su madre enferma necesita que las niñas estudien en el mismo centro, el más cercano a su domicilio. Solicita cambio de centro escolar, en tiempo y forma, para las dos hijas. Se lo conceden a una. A la otra se le deniega. No hay plazas disponibles arguye la Delegación de Educación de Cádiz, a menos que quede una vacante. El comienzo del curso en ciernes¿procede la vía de excepcionalidad?

Lo expuesto viene a indicar por enésima vez que la Administración educativa no resuelve los expedientes que tiene entre manos, ni de forma rápida ni efectiva. Es sabido que la mayoría de las veces la única forma de resolución es acudir a los medios y que la población se informe de lo que está ocurriendo. A veces, resulta.  En resumen, lo que acontece es que los poderes públicos obvian la legislación de mayor rango en materia de discapacidad. Quizás la desconocen. Lejos de resolver con rapidez, celeridad y efectividad, duermen los expedientes en cajones sin saber el ciudadano la finalidad de tal bloqueo. Y el perjuicio que se crea al alumno en materia educativa es de tal calibre que quizás ya no tenga reparación el daño cuando llegue la resolución que quizás tampoco sea ya efectiva.

La cuestión  planteada es si la Administración educativa tiene el poder suficiente de resolución rápida cuando se encuentra con un problema que hay que solucionar inmediatamente. En el caso descrito escuetamente apremia el inicio del curso escolar, que a primeros de septiembre  comienza y el tema no está resuelto. ¿puede el ente educativo más cercano al centro escolar resolver una cuestión acuciante donde se podrían estar tambaleando Derechos Fundamentales? ¿es tan difícil tener en el mismo centro escolar a dos hermanos con discapacidad por razones de necesidad familiar? ¿es tan difícil resolver sin que sea necesario un largo proceso burocrático en vía administrativa ¿es tan difícil resolver que hasta es necesario acudir a la vía judicial tan costosa y larga ¿¿es tan difícil entender que quizás aplicando la normativa de forma un poco más amplia y en interés del alumno se solucionarían muchos problemas de forma rápida y con la efectividad necesaria?

Estamos hablando del derecho a la educación del artículo 27 de la Constitución española, del derecho a la igualdad del artículo 14 de la CE, de la legislación orgánica  educativa, de la legislación autonómica educativa, de la normativa específica en materia educativa al respecto de alumnos con discapacidad, de la normativa internacional  tanto la Convención de Derechos de Personas con Discapacidad como la Convención de Derechos del Niño…. Es que una se sonroja cuando lista la cantidad de normativa promulgada y su escaso cumplimiento.

La Administración tiene prohibido ser arbitraria, ¡cómo no podía de otra forma! Pero arbitraria no puede ser una decisión con  la única finalidad de favorecer el bienestar de un alumno que necesita de esa Administración para poder estar en igualdad con el resto de alumnos. Si una madre no puede hacerse cargo de sus hijos por motivos de enfermedad sin ayuda de las Administraciones Públicas y solicita algo tan sencillo como escolarizar a sus dos hijas en el mismo centro escolar, el más cercano a su domicilio, teniendo sus hijas una discapacidad y grado de dependencia importante, entonces: ¿para qué pueden servirle a esa madre las Administraciones Públicas si no puede confiar en que puedan solucionarle su problema en el momento en el que surge?

La razón esgrimida de que las aulas tiene ya el cupo cubierto y no hay plazas disponibles no soluciona su problema (el siempre motivo poco motivado). Que escolaricen a una niña y a la otra no  tampoco soluciona nada, quizás acreciente más la desigualdad. Que empiece el curso y el tema esté sin resolver  no tiene calificativo. Se pudo haber solventado de otra forma, con una especie de discriminación positiva adjudicando una plaza escolar más por motivos de discapacidad, quizás sin acudir a instancias mayores. Hartos acuden a los medios. El ciudadano queda horrorizado de cómo funciona el sistema. Señor@s, sabemos que no es fácil, pero se necesita voluntad. El sueño de la igualdad sólo es posible si ejecutan las normas, si tienen sensibilidad con las personas con discapacidad que sólo desean ser iguales a los demás y disfrutar de los mismos derechos, no sólo porque lo dice la legislación  y es de justicia sino porque es de Derecho. Ajusten sus decisiones al sentir de los hombres sin darle tantas vueltas. Un niño no merece ser tratado así. Revisen de una vez el estancado andamiaje burocrático. Se darán cuenta que lo importante es ayudar al cumplimiento de los deseos de un niño. Y si ese niño tiene discapacidad y dependencia ayudarán a que el mundo sea mejor y, sobre todo, más igualitario.