Estimado navegante:

Otra de las efemérides que conmemoramos este 1 de enero del 2016 tiene que ver con la integración de España y Portugal a la UE. Como todos sabemos, no fueron negociaciones sencillas, pero al final, ambas partes, Gobierno y estructura comunitaria cedieron para que un país como el nuestro formara parte de esta superestructura europea.

Estamos hablando de un espacio de 4 millones de kilómetros cuadrados en donde coexisten 500 millones de personas fruto de la voluntad de veintiocho países. Europa es la mayor potencia económica comercial a nivel mundial mientras que a nivel de PIB es la segunda zona de importancia más rica.

En estas tres décadas de actividad europea ha emergido con fuerza el derecho comunitario, ahora espejo a seguir por cualquier derecho nacional. Y las cuestiones prejudiciales, muchas de ellas interpuestas por nuestros magistrados.  En ese caso se señala en rojo los cambios en el derecho hipotecario por el llamado caso Aziz, un varapalo a nuestra normativa propia, o el último fallo del TJUE sobre la retroactividad de las cláusulas suelo.

El derecho comunitario ha establecido las pautas a seguir en la llamada sentencia sobre derecho al olvido, donde el TJUE resolvía la cuestión prejudicial planteada por la Audiencia Nacional y respaldaba el Derecho al olvido señalando que los motores de búsqueda son también sujetos que tratan datos.

Ahora se espera con expectación el próximo Reglamento Europeo de Protección de datos. Tiene una vacatio legis de dos años, pero es evidente que es un elemento clave en la privacidad de todos los europeos. Habrá que ver cuál es el papel de los diferentes reguladores de protección de datos y si al final, tal y como parece en el último borrador que se conoce, la figura del DPO, Data Privace Officer, es necesaria para las empresas en su gestión de la privacidad.

La evolución de la economía y de las normas jurídicas ha convertido en Bruselas en una de las plazas claves para nuestros despachos de abogados.  Un año antes de la firma de los Tratados que convertían a España en socio comunitario, Gómez-Acebo & Pombo abría oficina propia en Bruselas.  La propia delegación del CGAE en la ciudad belga se creó en 1994. Y en esos años las grandes firmas se ubicaron en dicha ciudad europea.

Bruselas es una de las plazas claves de la vieja Europa. Precisamente en estos últimos años coexisten la presencia de los grandes bufetes españoles y norteamericanos, con boutiques más reducidas que, gracias a contar con especialistas que proceden de despachos de prestigio, también se sitúan en esta ciudad europea. Se trata, por encima de todo, de defender los derechos de los clientes ante las propias instituciones de la UE. Y, si es posible, captar negocio extranjero o inversiones que quieran llegar a nuestro país.

De forma progresiva, los despachos sofisticaron sus estructuras de letrados. La internacionalización provocada por la entrada en la UE hizo que los bufetes buscasen expertos en materia comunitaria. Ahí muchos Abogados del Estado decidieron tomar la excedencia para trabajar en estas empresas de servicios. Hoy por hoy, incluso las Big Four cuya apuesta por la abogacía es notable, cuenta con expertos letrados en estos temas europeos y regulatorios.

Desde hace unos meses Europa y la EEUU negocian un complejo acuerdo de libre comercio e inversiones. El TTIP busca establecer el mayor mercado libre del mundo entre Europa y Estados Unidos, un intento de negociación integradora, eliminando las barreras arancelarias o buscando una mayor armonización regulatoria. Todos sabemos de las dificultades, pero también de las grandes oportunidades que surgirían de este acuerdo.

En este contexto de abogacía sin fronteras, entender estas pautas puede librar a muchas empresas de multas millonarias y ofrecer a muchos despachos el prestigio de saber manejarse en un escenario solo apto para especialistas. Bruselas, sigue siendo hoy por hoy, tras treinta años de actividad empresarial y jurídica, un lugar clave para Europa y necesario en las agendas de nuestros abogados más europeístas y empresas más internacionales.