Vitoria, 1 ago (EFE).- El Gobierno Vasco ha editado la "Guía de actuación local frente a incidentes de odio racista, xenófobo, antigitano y Lgtbifóbico", con la que se quiere orientar las actuaciones de los ayuntamientos ante este tipo de delitos, entre las que destaca el llamamiento a situar a la víctima siempre en el centro para garantizarle un trato respetuoso y adecuado.

El documento, que ha sido presentado este lunes por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, ha sido elaborado por el Servicio vasco de Integración y Convivencia Intercultural, Biltzen.

Artolazabal ha explicado que su objetivo es ofrecer respuestas a municipios con realidades muy diversas en cuanto a su tamaño, sus recursos y su población. No obstante, ha precisado que será tarea de cada ayuntamiento, adaptar su contenido, para lo que contarán con el apoyo del Ejecutivo autonómico, ya que se trata de un "documento vivo", sujeto a revisión y a contraste.

El responsable de programas de Biltzen, Diógenes Sabana, ha detallado el contenido de esta publicación y ha dicho que aporta información a los entes municipales sobre conceptos clave, principios de actuación y propuestas de acción concretas, de manera que persigue "informar, sensibilizar, concienciar, prevenir y, sobre todo, brindar atención, acompañamiento y orientación a las víctimas de incidentes o delitos de odio".

Con la esperanza de que se convierta en una "herramienta útil", Sabana ha subrayado como principio más relevante "situar a la víctima siempre en el centro" para que se le garantice "un trato adecuado, confidencialidad, claridad, rapidez y respeto a la autonomía" y se evite su revictimización.

Entre las actuaciones propuestas destacan también la atención, información y orientación; la derivación, en función de la urgencia a un centro de salud o a la Ertzaintza; la sensibilización y denuncia social según la gravedad; la información y sensibilización pública a través de los medios de comunicación y el registro estadístico de los incidentes.

Artolazabal ha lamentado que los delitos de odio constituyen "una cuestión estructural, visibilizada en un aumento significativo de los discursos de odio, racistas, xenófobos, homófobos y contra el pueblo gitano, entre otros" que, según ha advertido, "van calando de forma peligrosamente progresiva en la sociedad" y "quiebran la convivencia".

En este sentido, ha recordado algunas de las conclusiones del reciente informe Neurtu 2021, elaborado por Ikuspegi, en el que se recoge que el 42,5 % de la población declara haber escuchado o presenciado insultos, el 17,9 % dice ser conocedor de amenazas y el 13,5 % de agresiones físicas a miembros del colectivo LGTBI.

Estos datos, a juicio de la consejera, muestran la necesidad de "visibilizar y denunciar la discriminación y los incidentes o delitos de odio", de apostar por la educación y la sensibilización y de garantizar apoyo y acompañamiento a las víctimas.

"En un momento histórico y político complejo la protección y la promoción de los derechos humanos pisan un suelo resbaladizo. Los incidentes y delitos de odio registrados ponen de manifiesto el largo camino que aún queda por recorrer en este ámbito y la necesidad de no bajar la guardia", ha asegurado Artolazabal, quien ha concluido que "ante los discursos de odio, las agresiones y la violencia solo hay una opción: actuar".