La Corte Penal Internacional ha emitido una orden de detención contra el presidente ruso Putin por crímenes de guerra debido a su presunta implicación en secuestros de niños en Ucrania. La orden también se extendió a Maria Alekseyevna Lvova-Belova, Comisionada para los Derechos del Niño en la Oficina del Presidente de la Federación Rusa. El Kremlin ha calificado de "nula jurídicamente" la orden de arresto del jefe del Kremlin, Vladímir Putin. El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, ha celebrado la orden de arresto internacional dictada contra el presidente ruso, mientras que Andriy Kostin, fiscal general ucraniano, ha agradecido a la Corte Penal Internacional la orden de arresto dictada. Es la primera vez en la historia que la Corte Penal Internacional dicta una orden de arresto contra el presidente de un país miembro del Consejo de Seguridad de la ONU.

Para poder comprender este asunto, debe atenderse a los artículos 58 a 61 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, hecho en Roma el 17 de julio de 1998. La Sala de Cuestiones Preliminares puede dictar una orden de detención contra una persona si el fiscal lo solicita y hay motivo razonable para creer que la persona ha cometido un crimen de la competencia de la Corte. La solicitud del fiscal debe incluir información como el nombre de la persona, la descripción de los hechos que presuntamente constituyen el crimen, y la razón por la cual se necesita la detención. La orden de detención incluirá la referencia al crimen y una descripción de los hechos. La Corte puede solicitar la detención provisional o la detención y entrega de la persona. El fiscal también puede solicitar una orden de comparecencia si cree que será suficiente para asegurar que la persona comparezca. La orden de comparecencia incluirá la fecha de la comparecencia y la descripción de los hechos.

El Estado receptor de la solicitud de detención tomará medidas necesarias para la detención y llevará al detenido ante la autoridad judicial competente para determinar si la orden se aplica, si se llevó a cabo conforme a derecho y si se respetaron los derechos del detenido. El detenido puede solicitar la libertad provisional antes de la entrega, y la autoridad competente examinará si existen circunstancias urgentes y excepcionales para justificar la libertad provisional y si hay salvaguardias necesarias para que el Estado pueda cumplir con su obligación de entregar a la persona a la Corte. La autoridad no puede examinar si la orden de detención se dictó conforme a Derecho.

Debe tenerse presente que las primeras diligencias que se llevan a cabo en la Corte para un imputado una vez que ha sido entregado o ha comparecido voluntariamente. La Sala de Cuestiones Preliminares informa al imputado de los crímenes que se le imputan y de los derechos que le corresponden, incluido el derecho a pedir la libertad provisional. Si el imputado está bajo una orden de detención, puede solicitar la libertad provisional, pero la Sala de Cuestiones Preliminares mantendrá la detención si cree que las condiciones para la libertad provisional no se cumplen. La Sala de Cuestiones Preliminares también revisa periódicamente la decisión de detener o liberar al detenido. Si el fiscal provoca una demora inexcusable en el proceso, la Corte considerará la posibilidad de poner en libertad al detenido. En caso necesario, la Sala de Cuestiones Preliminares puede emitir una orden de detención para hacer comparecer a una persona que haya sido liberada.

La Sala de Cuestiones Preliminares celebrará una audiencia para confirmar los cargos contra el imputado dentro de un plazo razonable después de la entrega o comparecencia voluntaria del imputado. La audiencia se celebra en presencia del fiscal, del imputado y de su defensor. Si el imputado renuncia a su derecho a estar presente, o huye y no se le puede encontrar, la Sala de Cuestiones Preliminares puede celebrar una audiencia en ausencia del acusado para confirmar los cargos. Si esto ocurre, el imputado estará representado por un defensor. Antes de la audiencia, se proporcionará al imputado un ejemplar del documento en que se formulen los cargos y se le informará de las pruebas que el fiscal se propone presentar en la audiencia. El fiscal puede modificar o retirar los cargos antes de la audiencia y debe presentar pruebas suficientes en la audiencia para demostrar que hay motivos fundados para creer que el imputado cometió el crimen que se le imputa. En la audiencia, el imputado puede impugnar los cargos, las pruebas presentadas por el fiscal y presentar sus propias pruebas.

En cualquier caso, como se ha comentado en algún medio, la orden de detención podrá tener más incidencia más adelante, cuando un sucesor de Putin en el Kremlin tenga la opción de abogar por el cumplimiento de la referida orden para detener al actual mandatario ruso y entregarlo a la Corte Penal Internacional. Sin embargo, hoy por hoy, ello parece imposible y, aunque esto pueda suceder más adelante, quizá Putin sea demasiado mayor como para comprender el alcance de sus actos y sus consecuencias o haya fallecido.