Tras el impasse navideño, llegan las primeras rebajas del año al sector del consumo, acompañado de una temida cuesta de enero por la que muchos consumidores aprovechan los descuentos de estos días para realizar algunas compras. Pues bien, las rebajas sólo deben reflejar un recorte en los precios de los productos y servicios, nunca en los derechos de los consumidores. Por ello, repasamos algunos aspectos legales que no debemos olvidar para poder aprovechar al máximo este periodo de descuentos.

Producto rebajado

El establecimiento debe presentar al menos el 50% de sus productos rebajados en este periodo. Para considerar a un producto como rebajado legalmente, éste debía estar ya en venta con un anterioridad de al mes un mes al periodo de rebajas, y debe contemplar las mismas garantías de calidad que cualquier otro producto. En ningún caso está permitida la venta de productos deteriorados como rebajados.

Periodo de rebajas

La actual legislación permite que cada comerciante defina el periodo de rebajas, aunque es obligatorio diferenciarlo de otros descuentos, como promociones especiales, ofertas por liquidación o saldos (productos de temporadas anteriores o con algún defecto). Lo que sí es obligatorio es informar al consumidor, de manera visible, del plazo de rebajas de cada establecimiento.

Etiquetado

En cuanto al etiquetado, además de la información relevante sobre el mismo, así como otros datos de interés (el uso recomendado, los materiales de fabricación, etc.), en la etiqueta debe constar el precio original y el final (con la rebaja final incluida) o, al menos, debe señalarse el descuento a aplicar.

Garantía del producto

La garantía de un producto, y el servicio postventa, serán los mismos durante la rebajas que fuera de este periodo. Tras la adquisición de un producto nuevo, independientemente de si está rebajado o no, el periodo de garantía es de dos años desde la fecha de compra. Por este motivo es fundamental conservar siempre el ticket de compra o factura, que el vendedor está obligado a entregar en todos los casos.

Política de devoluciones

La opción de cambio o devolución de un producto es una práctica muy extendida actualmente en las transacciones comerciales. Sin embargo, no es un derecho del consumidor, sino una política comercial. Por tanto, la devolución de un producto a cambio del dinero abonado no es como tal un derecho, y en muchos casos, las devoluciones sólo se permiten a cambio de cheques o vales para canjear posteriormente. Por ello, lo aconsejable es preguntar, antes de realizar alguna compra, por la política vigente en cada establecimiento. Asimismo, no hay legislación que regule el plazo para devoluciones, por lo que cada comerciante fija este periodo. Eso sí, el comerciante debe informar debidamente sobre las condiciones de devolución, así como de las posibles modificaciones que haya realizado en otras condiciones durante el periodo de rebajas (en muchos comercios, en periodo de rebajas no se acepta el pago con tarjeta, por ejemplo).

En el caso de las compras por Internet, se establece el plazo de catorce días naturales desde la recepción del pedido para devolver el productos sin coste. Además, cada vez son más frecuentes las compras en Internet, para las cuales hay determinados consejos específicos del comercio online que deben seguirse para realizar compras de manera segura en Internet.