- Te damos las claves para sabes si eres uno de los afectados por el pacto de precios entre concesionarios y si te pueden indemnizar.
La noticia ha saltado a los medios de comunicación, causando un notable revuelo entre los consumidores, que han visto de repente la posibilidad de reclamar algún tipo de compensación económica en el caso de haber comprado un vehículo entre los años 2006 y 2013.
No obstante, este asunto viene de tiempo atrás. En el año 2015 la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMV) impuso una sanción a una serie de concesionarios de distintas marcas, así como a diversas asociaciones de concesionarios, al considerar que éstos habían llegado a acuerdos en materia de fijación de precios, estableciendo descuentos máximos a aplicar y otras condiciones comerciales e intercambiando información sensible en el mercado de distribución de vehículo. Todo ello suponía una clara vulneración del principio de libre competencia, contraviniendo lo dispuesto en el artículo 1 de la Ley 15/2007 de Defensa de la Competencia.
Posibilidad de reclamar una compensación
Este pronunciamiento por parte del Alto Tribunal abre la puerta a plantear por parte de los consumidores afectados una acción judicial para solicitar a las empresas fabricantes una compensación por el sobrecoste que tuvieron que asumir a consecuencia de estas prácticas contrarias a la libre competencia.
En todo caso, conviene ser cautos, puesto que es pronto aún para saber qué alcance tendrá esta sentencia del Tribunal Supremo.
Esta sanción dio lugar a sucesivos recursos por parte de los concesionarios afectados. Finalmente, tras un largo recorrido judicial, se ha pronunciado la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo, desestimando los recursos interpuestos y ratificando en consecuencia la sanción interpuesta por la CNMV.
¿Cómo sé si soy uno de los afectados?
Hay que tener en cuenta además que no todos los consumidores que hayan adquirido un vehículo dentro de este intervalo temporal van a poder reclamar.
Es conveniente en primer lugar informarse sí se compró un vehículo de una marca afectada por esta política de concertación de precios y en alguno de los concesionarios objeto de la sanción interpuesta. La mejor opción para poder aclarar este punto es contactar con la plataforma de afectados por el cártel de vehículos o con alguna de las asociaciones de consumidores que en estos momentos están preparando demandas colectivas.
¿Me compensa reclamar?
Una vez determinado que sí podemos reclamar, es necesario valorar si nos compensa hacerlo. La respuesta no es sencilla. Se plantean dudas sobre como cuantificar el perjuicio real sufrido, pues va a depender de multitud de factores, como la marca y el modelo adquirido, en qué momento y en qué lugar se adquirió, etc.
La mejor opción para el consumidor en todo caso es adherirse a alguna de las demandas colectivas que se están preparando, dado que iniciar un procedimiento judicial a título individual puede plantear dificultades importantes teniendo en cuenta el coste que puede suponer un procedimiento de estas características.
Nuestra recomendación
El consejo que ofrecemos desde ARAG es ser en todo caso prudentes y antes de decidir iniciar cualquier acción judicial, informarse de las condiciones económicas a las que deberemos hacer frente. Es importante solicitar un presupuesto previo donde se contemple, de manera detallada y transparente, los distintos escenarios que pueden plantearse, así como todos los gastos asociados a la demanda, no únicamente los honorarios de abogado, sino también los gastos de procurador y el coste de los peritajes que sean necesarios para determinar la cuantía de la indemnización, y teniendo toda esa información en nuestras manos, decidir cual es la mejor opción.
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