Controlar el clima laboral es fundamental para la prosperidad de nuestra empresa. Si no conseguimos un ambiente de trabajo positivo, será imposible que nuestro personal esté contento y experimentemos una pérdida constante de personal. Pudiendo así tener problemas legales con diferentes trabajadores. Elevar el ambiente de trabajo debería ser el objetivo de cualquier organización.

Nos ayuda a mantenernos en continuo progreso, alcanzar objetivos y hacer de nuestra empresa un lugar más deseable para trabajar. No sería la primera vez que por no saber analizar las fortalezas y debilidades de una empresa, los trabajadores puedan tomar acciones legales contra ellas.

Si deseas que esto no pase en tu empresa, debes poseer diversas herramientas para medir el ambiente de trabajo.

Herramientas para medir el clima laboral

Encuesta laboral

Una de las formas más eficaces de obtener una gran cantidad de datos sobre la satisfacción del personal es realizar una encuesta de satisfacción laboral. Esto tiene un bajo margen de error, pero sólo si se hace correctamente.

El cuestionario no debe ser demasiado largo y debe constar de preguntas tanto cerradas como abiertas para dar a los empleados la oportunidad de dar su opinión con mayor libertad.

El anonimato es importante a la hora de realizar este tipo de encuesta, ya que da a los empleados la seguridad de que pueden responder sin preocupación por ninguna repercusión si su opinión no es positiva hacia sus jefes. Las respuestas pueden utilizarse para identificar áreas que requieren mejoras, ya sean tangibles o intangibles.

Para que nuestra encuesta de clima laboral sea eficaz, debemos aprovechar las ventajas de Sesame HR, un software de RR.HH. completamente equipado para realizar encuestas laborales.

Con esta aplicación, podrás elaborar un cuestionario que refleje la cultura corporativa y la dinámica de la organización, y lo más destacable es que se obtienen las respuestas inmediatamente.

Sondeos

Son una versión más sencilla que las encuestas de clima laboral. Los encuestados tardan menos tiempo en responderlas, pero también abarcan menos contenido. Se utilizan principalmente para consultar un tema concreto, por lo que no son demasiado intensivos.

Sin embargo, son una gran idea cuando se trata de aplicar cambios o introducir mejoras. Por ejemplo, pregunte al personal su opinión sobre la opción de teletrabajar un día a la semana puede hacerse con ayuda de este tipo de encuestas.

Focus Group

Durante estas conversaciones, se pide a los trabajadores que den su opinión sobre determinados asuntos de la empresa. Para que los empleados se sientan cómodos compartiendo abiertamente sus pensamientos y sentimientos, es importante crear un ambiente de confianza.

El número ideal de personas a incluir en el grupo de discusión es de seis a doce, y ayuda a incluir a personas de varios departamentos de la organización, lo que conduce a una visión más amplia de la cultura de trabajo.

Buzón de sugerencias

En términos de comunicación interna, el buzón de sugerencias es una herramienta excelente y una forma estupenda de medir el ambiente de trabajo. Lo que lo hace aún más útil es que permite el anonimato, por lo que el personal puede aportar sus ideas y propuestas de cambio sin temor a repercusiones.

Examinar y utilizar los consejos del buzón de sugerencias ayudará a mejorar el lugar de trabajo. Por lo tanto, tener un buzón de sugerencias no tiene sentido si las ideas presentadas no se tienen en cuenta.

Reuniones one to one

Aparte de las discusiones en grupo, también podemos realizar entrevistas individuales que giran en torno a temas concretos. Esto es especialmente pertinente cuando un empleado deja su trabajo por voluntad propia, en lugar de ser despedido.

En estos casos, los comentarios que recibimos serán más confiables porque el individuo no tiene nada de qué preocuparse y ofrece su opinión genuina.

Cómo medir el clima a través de la observación en la empresa

Evaluar el entorno de trabajo a partir de la observación Las perspectivas de los directivos y del resto del personal pueden ser a menudo diferentes. Sin embargo, esto no significa que los administradores no puedan tomar nota de lo que ocurre en la organización.

De todos los métodos para evaluar el clima en el trabajo, éste es el más subjetivo e impreciso, pero aun así puede ser útil.

Las observaciones informales de los empleados pueden ayudarnos a averiguar qué les molesta, por ejemplo, cuando se refunfuñan por el calor debido al aire acondicionado en verano.

Otro ejemplo podría ser los retrasos frecuentes causados ​​por los retrasos de los trenes. Un horario flexible o el trabajo desde casa pueden ser la respuesta. Las quejas sobre la inadecuación del equipo existente o la disminución de la eficacia en una sección son señales de que algo va mal.

Finalmente y como hemos podido comprobar, existen muchas formas de medir el clima laboral dentro de una empresa. Lo fundamental es elegir la que mejor se adapte a la forma de trabajar de los empleados para que se sientan cómodos en este proceso de análisis y no expongan ninguna queja que pueda causar un problema mayor a la empresa.