El artículo 23.2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial permite a la jurisdicción española conocer de los delitos cometidos en el extranjero cuando el autor sea español y, además, se cumplan tres requisitos: que el hecho sea punible en el lugar de ejecución; que la víctima o la Fiscalía interponga querella ante los juzgados españoles –no es suficiente denuncia, es necesaria querella.
el Código Penal de 1995 ya castigaba en su artículo 181 como autor de abuso sexual a todo el que «sin que medie consentimiento, realizare actos que atenten contra la libertad sexual de otra persona». Si el hecho se producía, además, mediante violencia o intimidación, se consideraba agresión sexual y se castigaba con una pena mayor.
De abrirse finalmente una causa penal, las claves de una condena por agresión sexual pasarán por analizar si hubo consentimiento y si existió algún tipo de ánimo sexual por parte de Rubiales a la hora de plantar un pico ante las cámaras de televisión a la jugadora Jenni Hermoso, campeona del mundo, algo para lo que se cuenta con nutrida jurisprudencia del Tribunal Supremo.
Como precedente judicial más inmediato, la multa de 13.800 euros impuesta en septiembre de 2019 empresario que simuló besar a la líder de Adelante Andalucía Teresa Rodríguez.
El delito por el que se abren diligencias es el 178 del Código Penal, que prevé penas de prisión de uno a cuatro años, como responsable de agresión sexual, para el que realice cualquier acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento. En el punto 2 de este artículo se alude al empleo de "una situación de superioridad", algo que al ser Rubiales presidente de la federación a la que pertenece Jenni Hermoso también deberá ser analizado.
En España, los delitos sexuales están regulados en el Código Penal, y el consentimiento se considera un factor determinante. La ley establece que cualquier acto sexual sin el consentimiento de la otra persona se considera un delito sexual, y las penas varían según la gravedad de la conducta, como, de acuerdo a la antigua denominación, agresión sexual o abuso sexual.
Es importante destacar que la falta de consentimiento puede deberse a diversas circunstancias, como la fuerza, la intimidación, la coacción, la incapacidad de dar un consentimiento válido debido a la embriaguez o a la incapacidad mental, o simplemente la falta de acuerdo voluntario por parte de cualquiera de las partes.
