Stress, ansiedad y depresión, así como el consumo excesivo de alcohol y el uso de drogas, tienen preocupada a la ABA, que lanzó un “kit de herramientas de bienestar” para que los empleadores reaccionen cuando detecten alguno de estos casos. El fenómeno, lejos de disminuir, ha mostrado un alza.

Sofía Martin L.

En un artículo publicado a mediados de septiembre, en The Global Post, se analizó un tema que en el mundo anglosajón se toman muy en serio: la salud mental de los abogados.

En esta ocasión, el objeto de la nota fueron los problemas de stress, ansiedad y depresión de aquellos que trabajan en firmas, incluyendo el uso de drogas, tras el llamado que hizo la American Bar Association (ABA) para que los despachos se comprometan con el tema. Gracias a estudios conducidos por un grupo de trabajo de la entidad, ya se dispone de cifras, de las cuales se pudieron extraer conclusiones, que no son muy alentadoras, y que derivaron en la firma de un protocolo de acuerdo de 7 puntos.

Sin mejoras

Para la ABA, avanzar en el bienestar de quienes se desempeñan en el sector legal ha sido un tema crucial desde hace un par de años. Para ello el grupo de trabajo —que se constituyó hace exactamente 1 año— pidió a los empleadores tomar medidas muy específicas para lograr ciertas metas consistentes en la toma de conciencia del problema y mejorar la calidad de vida de los abogados.

Fue en 2016 cuando se publicó un estudio que develó profundos niveles de alcoholismo y lo que en los países de habla inglesa denominan “problemas de salud mental”, aunque en el mundo latinoamericano el stress, síndromes ansiosos o derechamente cuadros de depresión no tienen la connotación de enfermedad que pareciera tener en el mundo anglosajón.

La preocupación de la ABA se suscitó porque ambos problemas han ido en aumento respecto de lo que muestran los estudios previos.

Cerca del 21% de los abogados litigantes o empleados en empresas, muestra que incluyó a los jueces que respondieron la encuesta, reportaron un consumo excesivo de alcohol, mientras que el 28 % dijo haber experimentado depresión y el 19% sintió ansiedad. El 23% de ellos también evidenció ha ber pasado por períodos de stress.

El estudio fue conducido por la comisión de la ABA y por la Hazelden Betty Ford Foundation. Basados en los resultados de la investigación y en la lista de recomendaciones de la National Task Force on Lawyer Well-Being, el grupo de trabajo lanzó recientemente un “toolkit de well-being” para abogados y empleadores, que se encuentra disponible sin costo alguno al buscar en Google Chrome o en Internet Explorer (para quienes todavía lo usen).

Hacerse cargo

La American Bar association espera poder emitir una resolución en la reunión de enero, que propondría una política modelo a adopatr por los empleadores del sector llegal para el caso de que lleguen a sospechar que uno de sus trabajadores está afectado por consumo de drogas o temas que afecten su estabilidad emocional.

El presidente de la ABA, Bob Carlson, dijo en una declaración: “Muchos abogados han luchado con el alcohol, desórdenes mentales y abuso de sustancias, y muchos de nosotros hemos observado a amigos luchar contra ello”. “Esta campaña pretende dar a estos problemas la atención que merecen, haciendo conciencia en la profesión y poniendo a disposición de los afectados la ayuda que necesitan para salir adelante. Espero que todas las firmas consideren adherirse al compromiso”, añadió.

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