• “En este contexto veo claro que la abogacía debe presentar un modelo de Pacto por la Justicia al que se sumen todos los operadores políticos y sociales del país para generar el citado debate sobre si hay que mantener el modelo con Ministerio, CGPJ y CCAA para administrar la justicia”
• ·Debemos pedirle al Ministerio de Justicia que ya nos dé el visto bueno sobre el Estatuto General de la Abogacía. Se logró un consenso interno importante para su aprobación.   Mi idea es que se pueda ir aplicando la parte que se pueda, la disciplinaria aún no, si soy elegida presidente del CGAE”

Recta final de la campaña electoral a la presidencia del CGAE. Será el 14 de enero cuando sepamos quién va a suceder a Carlos Carnicer, catorce años como máximo responsable de la abogacía institucional.

Este pasado viernes tuvo lugar en Salamanca un acto en el que los cuatro candidatos, Pere Huguet, Francisco Javier Lara, Marcos Camacho y Victoria Ortega pudieron presentar su programa al Consejo Autonómico de Castilla y León: “Los programas son muy similares, creo que quienes nos presentamos sabemos los cambios que necesita el Consejo y los problemas de la abogacía. Al final, aquel que genera más confianza entre los 83 decanos será quien se lleve el triunfo”, comenta Victoria Ortega, exsecretaria general de la entidad en los últimos años, con quien cerramos esta ronda de entrevistas.

“Me hace mucha ilusión poder ser la primera mujer en la historia del CGAE que ocupase este cargo, ya lo fui como Decana del Colegio de Cantabria en el periodo 2000-9 y más tarde como Secretaria General del Consejo, en los últimos cinco años, cargo del que he dimitido en estos comicios”, apunta.  Nuestra entrevistada es partidaria que los principales cargos de Gobierno del CGAE sean cubiertos por decanos y vislumbra la necesidad de generar un debate sobre el desarrollo tecnológico de la entidad y los Colegios desde ITCGAE. “Tenemos que ver cuál es el papel del Consejo y cómo se va a financiar este desarrollo, si con el método habitual o de otra manera”.

 

Su perfil

“Es cierto que afrontamos nuevas realidades y nuevos retos dentro de la profesión que ha avanzado mucho. En este contexto el CGAE tiene que adaptarse a la nueva realidad, si bien es cierto que el legado que nos deja Carlos Carnicer es importante. Se han hecho muchas cosas y el propio Consejo sufrió una transformación importante.

Sin embargo, la propia dinámica de la profesión y los cambios a los que está sujeta, invita a seguir trabajando en esa dirección mejorando la comunicación interna de la entidad y el papel de las Comisiones, en especial la que regula la relación entre el Consejo y los Consejos Autonómicos. Si salgo elegida presidenta, conservaremos lo mucho que se ha hecho para luego avanzar en otras posibilidades.

Estoy convencida de que, con el uso de la tecnología, que ya ayuda al abogado en el ejercicio de su actividad profesional, será una herramienta importante para mejorar la comunicación interna del Consejo. Hay que seguir avanzando en esa materia, no cabe duda. La abogacía debe ser protagonista de los próximos cambios normativos. Y liderar el Pacto por la Justicia del que todo el mundo habla”.

 

Sra. Ortega, Desde fuera se percibe la sensación que el Consejo necesita algo más de transparencia para que se sepa mejor qué es lo que hace...

Es posible, pero lo primero que hay que señalar es que somos un Consejo de Colegios y la comunicación nuestra debe ser con los propios Colegios.  Luego, las entidades colegiales deben tenerla con sus colegiados.

A mi juicio, lo que debe mejorarse, por tanto, es esa comunicación con los 83 Colegios y seguramente debería ser más inmediata. Gracias a la tecnología que existe creo que podremos afrontar este reto con éxito. Se trata de que se conozca mejor el Consejo y el trabajo de sus Comisiones.  De esta forma mejoraríamos el deseo de pertenencia a la organización.

Hablaba de Comisiones, si usted es elegida presidente del CGAE, ¿seguirán las mismas o hará algún cambio importante?

Es el momento de redefinir cada Comisión para que sean más eficaces.  Habrá que modificar el Reglamento para en el Pleno consensuar cuál va a ser la composición de cada una de ellas y las materias a tratar y cuántas puede un Consejero pertenecer o no.

 Tengo especial interés en la participación de los 83 decanos del Pleno en dichas Comisiones. Su presencia es clave para cualquier logro que se quiera conseguir en el CGAE. El trabajo que se hace en cada una de ellas es fundamental para el funcionamiento pleno del Consejo.

Todos los candidatos han coincidido en mejorar el funcionamiento de la Comisión Interterritorial que regula la relación entre el Consejo y los Consejos Autonómicos de la Abogacia..

Ha llegado el momento de revisar su funcionamiento para incrementar la relación entre los Consejos Autonómicos y los Colegios. Creo que una figura importante será la de un decano que se encargue de coordinar todo el trabajo de las diferentes Comisiones y la propia labor del CGAE en relación con los Consejos Autonómicos. Creo que así se logrará más eficiencia por el trabajo desarrollado entre todos para que todos estemos informados de lo que se hace.

Hablar de eficiencia es hacerlo de la tecnología. Desde hace años el CGAE impulsa ITCGAE, entidad que ya ayudado a modernizar la abogacía institucional. ¿Seguirá usted con la misma política de actividad como hasta ahora?

Es evidente que desde el 2004 el CGAE apostó por la tecnología y así se configuró ITCGAE, como usted ha comentado. Gracias a ella la abogacía tiene una situación estratégica primordial. De hecho, la aplicación Lexnet Abogacía revela el trabajo que se ha hecho y que los abogados estamos preparados para el llamado “papel cero”.

Esa apuesta ha seguido siempre. En ella, tenemos que seguir insistiendo y ver ahora como la llevamos a cabo para que cubra la totalidad de las necesidades de todos los Colegios y compañeros abogados.

¿Eso significa que el CGAE apuesta por el mismo modelo tecnológico como hasta ahora?

A mí lo que me gustaría si soy elegida presidente del CGAE es tener un debate sereno y tranquilo sobre este tema, clave para la modernización de los Colegios.  Tenemos que saber cuál va a ser el papel del Consejo directamente y cuál será la fuente de financiación de nuestro desarrollo tecnológico. Habrá que organizar uno o varios Plenos sobre este tema para definirlo con claridad qué es lo que queremos.

¿En un escenario de los próximos cuatros, los 83 Colegios de abogados actuales son viables realmente?

Estoy convencida que son viables y necesarios. Es fundamental para mantener la cercanía en la administración de Justicia su presencia, no tendría sentido suprimirlos por ello. Si consigo merecer la confianza de mis compañeros, lo defenderé donde haga falta.  La labor que hacen las entidades colegiales tanto para los compañeros letrados y la sociedad es fundamental.

También estamos pendientes del Estatuto General de la Abogacía, aprobado hace meses pero que Justicia no se ha pronunciado sobre el mismo...

Es cierto que debemos pedirle a Justicia que ya nos dé el visto bueno sobre nuestro Estatuto. Se hizo un gran esfuerzo para su aprobación donde se llegó a un consenso interno importante. Esperemos que la aprobación ya sea inmediata.  Mi idea es que se pueda ir aplicando la parte que se pueda, la disciplinaria aún no.

 En él ya hay cambios importantes, como la ponderación de voto, con la que ya estamos funcionando en decisiones económicas donde se utiliza el llamado doble voto. Queda fuera votaciones como la elección del presidente que es un decano, un voto.  También se habla de la reducción del mandato del presidente del CGAE a dos legislaturas de cuatro años.

Respecto al papel de los Consejeros no decanos, ¿Cuál debe ser su lugar dentro del CGAE, realmente?

Este ha sido uno de los temas que se abordó cuando se aprobó el propio Estatuto General de la Abogacía donde se clarificó su presencia.  Hasta ahora se ha visto que había algunos cargos como la Secretaria General, Tesorería que exigían tiempo que no era compatible con ser decano y el propio ejercicio de la profesión de abogado.

Dicho esto, los propios decanos me han pedido que en el futuro la figura del Secretario General y gran parte del Gobierno del CGAE sea ocupado por decanos, y me parece bien

A nivel externo, al nuevo presidente del CGAE le esperan retos importantes en un entorno legislativo nuevo, con otro Gobierno posiblemente...

Es el momento de potenciar la función de lobby del CGAE con el Gobierno, Parlamento y futuros diputados y senadores, además de con el Ministerio de Justicia. Ahora las relaciones son buenas, como se demuestra del apoyo de la abogacía con Lexnet Abogacía para buscar la justicia sin papeles. Veremos a ver que nos depara el futuro.

Hay que procurar que las instituciones sientan la necesidad de tratar con la abogacía aquellas normas que tienen que ver con la profesión. Que se perciba nuestro protagonismo como operador jurídico para intervenir directamente en cualquier evolución legislativa.

Lexnet revela la buena colaboración con el Ministerio de la abogacía, sin embargo, los problemas surgen en la Justicia Gratuita y en la futura Ley de Servicios y Colegios Profesionales...

Es cierto, no hemos sabido explicar a Competencia que Justicia gratuita es un servicio público, no sometido a las leyes de mercado, y que sus sanciones desproporcionadas no tienen sentido. Creo que al final lo conseguiremos con paciencia y el esfuerzo de todos.

 Es fundamental en esta legislatura dar un paso adelanta para explicarles lo que se hace, tanto en España como a nivel de competencia también en Europa, y consensuar si es posible una nueva Ley de Servicios y Colegios Profesionales que respalde el papel de nuestros Colegios.

¿El modelo de gestión de nuestra justicia, con tres actores: Ministerio de Justicia, CGPJ y CCAA es el más adecuado para su propia administración?

Es un modelo de gestión complicado que necesita de mucha coordinación para que funcione realmente.  Cuando en mi programa electoral hablo de liderar el Pacto por la Justicia desde la abogacía, advierto que este modelo hay que analizarlo muy bien y ver si es el que nos hace falta, de verdad.

 Este es uno de los temas que se debe debatir con claridad.  En este contexto veo claro que la abogacía debe presentar un modelo de Pacto al que se sumen todos los operadores políticos y sociales del país para generar el citado debate. Bien estructurado se evitaría que existiese una justicia de dos velocidades, como hay en la actualidad.