El acto de clausura del XII Congreso Nacional de la Abogacía, que se ha celebrado en Valladolid del 8 al 11 de mayo con la asistencia de más de 2.500 congresistas y ponentes, se celebró el sábado por la mañana. Tras la entrega de los premios Startup de la Abogacía y del I Hackaton Abogacía y antes de la realización de un homenaje a al humorista Forges, la presidenta de la Abogacía, Victoria Ortega realizó un pronunciamiento sobre la abogacía perseguida.
El Consejo General de la Abogacía Española, como miembro fundador del Observatorio Internacional para la Abogacía en Riesgo, estará siempre en la vanguardia de la defensa de los compañeros perseguidos. En la línea de este compromiso con la profesión, el viernes se firmó un Convenio Internacional de Amparo Colegial, junto con las abogacías iberoamericanas; “que habrá de servir para reforzar las cooperaciones entre letrados de distintos países, y afianzar que los abogados también se sientan protegidos y defendidos fuera de sus fronteras”, aseguró Ortega.
Ortega también tuvo un recuerdo para “todas las abogadas y abogados asesinados, como nuestra compañera de Zaragoza, Rebeca Santamalia. Con aquellos acosados, amenazados y perseguidos por el mundo – como Nasrin (Premio Derechos Humanos de la Abogacía Española en 2010), y como tantos y tantos…”
El acto central de la clausura fue la lectura de la Declaración de Valladolid, que recoge las conclusiones del XII Congreso Nacional de la Abogacía celebrado en Valladolid del 8 al 11 de mayo.
La Declaración de Valladolid, leída por Victoria Ortega durante el acto de clausura, reafirma -próximo al cumplimiento de los 50 años del Congreso de León- su compromiso con un futuro de progreso, paz y convivencia, basado en los mismos valores que han inspirado el periodo democrático de la Constitución.
ACCEDA A LA DECLARACIÓN DE VALLADOLID
ACCEDA AL PRONUNCIAMIENTO SOBRE LA ABOGACÍA PERSEGUIDA
UN GRAN PACTO DE ESTADO POR LA JUSTICIA
Ante la preocupación de la Abogacía por la lentitud e incumplimiento de plazos, por la desorganización y burocracia, por el déficit y escasez de órganos judiciales y medios, por los problemas de personal y de planta judicial; la Declaración de Valladolid reitera el compromiso y disponibilidad de la Abogacía para abordar la imprescindible reforma estructural de la Justicia que sólo podrá realizarse a través de un gran Pacto de Estado desde el diálogo, el consenso y la participación de todos los colectivos implicados.
El nuevo Código Deontológico, en vigor desde este Congreso de Valladolid, es la base del compromiso de la abogacía con la ciudadanía y la sociedad.
Punto de consenso generalizado es la necesidad de promulgar una Ley Orgánica que regule el derecho de defensa cerrando el circulo de garantías constitucionales de la ciudadanía, situando a nuestro país en la vanguardia de la protección de sus derechos.
Ante la transformación tecnológica, la Abogacía constata la necesidad de acometer con urgencia nuevas regulaciones y reformas de derecho sustantivo que protejan de modo eficaz los derechos de la ciudadanía y, en especial, el derecho a la intimidad, a la propia imagen y a la igualdad.
DEFENSA DE LA JUSTICIA GRATUITA Y OBJETIVOS ODS
La Declaración de Valladolid afirma que hoy sigue presente el compromiso con la promoción y defensa general de los derechos humanos y la garantía del derecho universal de acceso a la Justicia. La función social que tiene atribuida la Abogacía, nos obliga a implicarnos también en el Derecho al Medio Ambiente, comprometiéndonos en la defensa de la sostenibilidad de nuestro mundo y haciendo realidad los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Nuestro sistema de justicia gratuita es un servicio público, ajeno a las leyes del mercado y la competencia, que garantiza el derecho universal de acceso a la justicia, con profesionales con un alto compromiso y capacitación, nunca suficientemente reconocido.
Además, la Igualdad real y efectiva es un desafío colectivo que requiere de un profundo cambio cultural, que implica compromiso, voluntad y firmeza para impulsarlos. La Abogacía Española siempre estará construyendo con su voz, con su acción y con sus propuestas una sociedad más libre, democrática, justa e igualitaria.
Haciendo gala del lema del Congreso ‘Fuimos presente, Somos futuro’, la Declaración de Valladolid afirma que este futuro está garantizado con una Abogacía joven preparada, responsable y emprendedora, con un potencial extraordinario. La abogacía transformadora requiere un sistema de acceso eminentemente práctico y útil para el ejercicio de la profesión y una apuesta decidida por la especialización y formación continua que garantice un servicio a la ciudadanía que responda a los estándares de calidad y excelencia que exige la protección de los derechos y libertades de los ciudadanos.
León fue flor de un día. Valladolid nos marca el camino.
HOMENAJE A FORGES
Tras el hilarante diálogo de Leo Harlem que amenizó a los congresistas con sus divertidos gagas humorísticos de su blog de viajes, Juan Fernando López Aguilar, eurodiputado y ex ministro de Justicia, rindió un emotivo tributo a la abogacía por su contribución al Estado Constitucional de Derecho y al imperio de la Ley y tuvo un recuerdo para Alfredo Pérez Rubalcaba, “una persona que ha trabajado para que los ciudadanos tengan el pleno disfruto de sus derechos y libertades”.
Antonio Fraguas de Pablo ‘Forges’, fallecido en 2018, es otra persona, como Rubalcaba, que cubrió con sus viñetas los 40 años de Constitución con dibujos que eran un alarde de “reverencia y ternura”. Forges y López Aguilar mantuvieron una gran amistad al pertenecer al grupo de viñetistas de los años 70.
Forges fue “un gran historiador de los episodios nacionales de la democracia y de los últimos años de la dictadura”, recordó el que fuera ministro de Justicia y haciendo un parangón histórico con la labor de otro canario, Benito Pérez Galdós. El ejemplar “Forgianos“, de la editorial Terra Natio, ha estado disponible durante los días del Congreso en el stand de la Abogacía Española.
No hay comentarios.