- Según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), la segunda causa de muerte por accidente de tráfico en España el año 2016 fue el atropello, con 389 fallecidos, y la siniestralidad en las ciudades aumentó un 18%.
- A 30 km/h un peatón atropellado tiene más del 90 %, de posibilidades de sobrevivir. Según datos de la Red, en los municipios en los que se ha reducido la velocidad los accidentes graves han disminuido un 80 %.
- En municipios con menos de 100.000 habitantes la reducción de la velocidad máxima de circulación por debajo de los 30 km/h debería aplicarse en todas sus vías urbanas, salvo en contadas excepciones
PONS Seguridad Vial, empresa líder en consultoría estratégica pública y privada de movilidad, ha presentado junto a la asociación internacional Red de Ciudades que Caminan una obra conjunta que, con el título “Ciudades pensadas para caminar”, tiene como objetivo reducir la tasa de accidentalidad de los peatones en las ciudades y ofrecer claves técnicas a los ayuntamientos para la implantación de modelos de movilidad que fomenten la cultura del caminar. Según la DGT, la segunda causa de muerte por accidente de tráfico en España el año 2016 fue el atropello, con 389 fallecidos, y la siniestralidad en las ciudades aumentó un 18%.
La guía práctica cuenta en su contenido con el ejemplo de varios ayuntamientos pertenecientes a la Red de Ciudades que Caminan como el Ayuntamiento de Ansoáin, Córdoba, Irún, Pontevedra, Sevilla, Torrelodones y el de Vitoria-Gasteiz, las cuales han aportado el resultado de sus experiencia a la hora de implantar políticas de promoción y defensa del peatón en la ciudad. Según los datos expuestos en el libro, en aquellos municipios en los que se ha reducido la velocidad los accidentes graves han disminuido un 80 %.
Shara Martín Palma, directora general de PONS Seguridad Vial e impulsora de la edición del libro, dio la bienvenida a los asistentes y recordó que “si hoy más de la mitad de la población mundial vive en urbes y se estima que en 2050 dos terceras partes de la población mundial viva en ciudades, la base de una adecuada planificación urbana ha de estar centrada en el peatón”.
Por su parte, Pablo Barco Ballesteros, coautor y coordinador técnico de la Red de Ciudades que Caminan, resaltó que esta publicación “simplemente pretende ser un libro de recetas destinado a animar a algunos ayuntamientos a cocinar ciudades con ingredientes que sepan cada vez más a relaciones humanas y cada vez menos a tráfico motorizado. Las personas con responsabilidades en el espacio público tienen que mirar por la salud de sus habitantes y comenzar a pensar en el tráfico excesivo como en una verdadera enfermedad que causa la muerte de miles de personas cada año como consecuencia de los numerosos accidentes viales en zonas urbanas así como debido al elevado incremento de los problemas respiratorios”, concluyó.
Entre las recomendamos generales que exponen los autores de “Ciudades pensadas para caminar” están el jerarquizar el viario público, poniendo en primer lugar al peatón, así como el elaborar planes estratégicos de acción con la finalidad de reducir la velocidad en las zonas urbanas por debajo de los 30 km/h, incrementar las zonas peatonales y las vías con plataforma única, mejorar de manera clara la seguridad peatonal en los cruces, apostar por las aceras continuas en la mayoría de las intersecciones y establecer una red peatonal cómoda, continua y segura en toda la ciudad.
El calmado del tráfico, clave en la protección del peatón
Según los datos presentados en el libro, a 30 km/h un peatón atropellado tiene más del 90 %, de posibilidades de sobrevivir. De este modo, la Red de Ciudades que Caminan expone en la publicación que en municipios con menos de 100.000 habitantes la reducción de la velocidad máxima de circulación por debajo de los 30 km/h se aplique en todas sus vías urbanas, salvo en contadas excepciones.
En aquellos municipios con más de 100.000 habitantes, la reducción de la velocidad máxima de circulación por debajo de los 30 km/h se aplicaría en todas sus vías urbanas planificando, si fuese necesario, una red básica de calles principales por encima de los 30 km/h (preferiblemente 40 km/h) no superior al 20 % del total de sus vías urbanas.
Por último, el libro destaca que en España, a diferencia de otros países europeos, no existe ninguna señal para indicar las calles peatonales por lo que sólo se indica la prohibición del acceso a vehículos.
La presentación, celebrada en la sede de la Fundación PONS, se completó con una serie de intervenciones y un debate posterior con los asistentes con la participación de los dos autores, Pablo Barco y Ana Belén Montalbán, junto al patrono de la Fundación PONS y ex director General de Tráfico, Pere Navarro.
La nueva obra, que está ya disponible en la tienda online de PONS Seguridad Vial (www.ponseditorial.com) y en Amazon, supone la tercera entrega de la Colección “Movilidad Responsable” que nació en 2015 con la publicación de un libro dedicado al fenómeno de Pontevedra como ejemplo de transformación urbana (Pontevedra, otra movilidad, otra ciudad) y cuya segunda entrega, con el título “Ciudades y bicicletas” se centró en medidas para promover el uso de las dos ruedas como alternativa al vehículo motorizado. El objetivo de la colección es seguir recopilando y divulgando experiencias, propuestas, políticas públicas y realidades relativas a una movilidad responsable, poniendo el foco en los principales protagonistas de la nueva movilidad basada en parámetros fundamentales para todos como la salud, la economía y el diseño del espacio urbano.