Hay negligencias médicas, en términos generales, cuando un profesional médico no actúa conforme al conjunto de prácticas médicas aceptadas para el ejercicio de la profesión, conocidas estas como lex artis médica, y, a consecuencia de ello, se causa alguna lesión al paciente. En el presente artículo nos centramos en las negligencias médicas en el parto más comunes.
En todo caso, para que exista negligencia médica tiene que haber un nexo de causalidad, esto es, relación, entre el daño producido y la actuación del profesional sanitario contraria a la lex artis.
Las negligencias médicas en el parto son aquellas que se producen bien en el momento del parto o bien días/horas previas al parto cuyas consecuencias se conocen en el momento de nacimiento del bebé. Pueden tener consecuencias muy graves tanto para la madre como para el bebé.
Las negligencias médicas en el parto más comunes son:
- Falta de monitorización fetal adecuada, lo que puede llevar graves consecuencias para el bebé y para la madre, entre las que destacamos:
- Hipoxia fetal (falta de oxígeno) lo cual puede causar lesiones cerebrales, discapacidades y en casos extremos la muerte del bebé.
- Retraso en la intervención en caso de problemas durante el parto, como presentación podálica, desproporción cefalopélvica, entre otros.
- Aumento del riesgo de cesárea de emergencia
- Aumento del riesgo de parto prematuro
- Aumento del riesgo de infección en la madre.Es importante mencionar que la monitorización fetal es esencial para detectar cualquier problema durante el embarazo y el parto, y para tomar medidas para minimizar el riesgo de complicaciones.
- Demora en la realización de una cesárea. Entre las consecuencias más graves se encuentran:
- Hipoxia fetal.
- Desproporción cefalopélvica (bebé grande y/o con un diámetro craneal grande y cérvix cerrado)
- Distocia de hombros (dificultad para pasar los hombros del bebé durante el parto)
- Aumento del riesgo de hemorragia postparto
- Aumento del riesgo de infección en la madre.Es importante mencionar que una cesárea debe ser realizada en el momento adecuado, cuando existen indicaciones médicas para ello, ya que retrasarla puede poner en riesgo la vida y la salud del bebé y de la madre.
- Uso inadecuado de fórceps o ventosas para extraer al bebé, que pueden suponer:
- Lesiones en la cabeza y el cuello del bebé, como fracturas óseas, hematomas, lesiones cerebrales, etc.
- Lesiones en el rostro del bebé, como cicatrices, quemaduras, etc.
- Problemas de salud a largo plazo, como discapacidades, trastornos del desarrollo, etc.
- Aumento del riesgo de parto prematuro
- Aumento del riesgo de infección en la madre
- Hemorragia posparto
- Lesiones en el bebé durante el parto, como fracturas óseas o lesiones cerebrales.
- Infecciones en la madre después del parto.
- Falta de atención postparto adecuada, lo que puede llevar a complicaciones como hemorragia.
- Error en el diagnóstico de la posición del bebé.Estos solo son algunos ejemplos de las negligencias en el parto más frecuentes, si bien debes tener en cuenta que cada asunto es distinto y que es necesario estudiar con detalle cada uno de ellos para conocer si es posible reclamar una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados tanto a la madre como al bebé.
RECLAMAR INDEMNIZACIÓN POR NEGLIGENCIA EN EL PARTO
Como consecuencia de una negligencia médica, los afectados directamente o, en determinados casos, sus familiares, tienen derecho a solicitar una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados.
El procedimiento a seguir para reclamar una negligencia médica varía en función de si la actuación negligente ha tenido lugar en un hospital público o en hospital privado. Los plazos también son distintos.
- Negligencia médica en hospital privado. El plazo máximo es de 1 año ó 5 años, en función del caso concreto, desde estabilización o curación de las secuelas, o bien desde el fallecimiento.
- Negligencia médica en hospital público. El plazo máximo es de 1 año desde la estabilización o curación de las lesiones o bien desde el fallecimiento.En todo caso, es recomendable que un abogado revise el caso para que te pueda indicar si estás en tiempo o no para iniciar la correspondiente reclamación, toda vez que en caso de fallecimiento el plazo es muy claro (1 año) pero en el caso de que haya lesiones el inicio en el cómputo es más complejo, de modo que cada asunto tiene que estudiarse detenidamente.
¿QUÉ HACER SI HE SUFRIDO UNA NEGLIGENCIA MÉDICA EN EL PARTO?
Si consideras que tu situación encaja en una de las negligencias médicas en el parto más comunes descritas a lo largo del presente artículo, o que podría encajar en una actuación negligente por parte de los profesionales sanitarios que te han atendido, no dejes pasar la oportunidad de reclamar una indemnización por los daños y perjuicios que te han ocasionado.
Ponte en contacto con un abogado especialista en negligencias médicas para que estudie tu asunto detalladamente, junto con un perito médico, y te indique tanto las posibilidades de actuación como la viabilidad para iniciar una reclamación por daños y perjuicios.