Un órgano jurisdiccional de Los Ángeles ha condenado a Johnson & Johnson a pagar 417 millones de dólares, que equivalen a 353 millones de euros, a una mujer que desarrolló un cáncer de ovarios después de utilizar, durante años, el polvo de talco de esa marca. La condena se fundamenta en la falta de información aportada por Johnson & Johnson sobre el riesgo de cáncer asociado al uso de productos con talco, entre los que destaca el denominado Johnson's Baby Powder.

El caso es uno de muchos que se están desarrollando contra la compañía. Concretamente, hay más de 4000 procesos que están pendientes contra la compañía por defectos de información sobre el peligro cancerígeno. Es verdad que no existe acuerdo entre los especialistas médicos sobre la naturaleza cancerígena de los polvos de talco, que solo parecen generar riesgos cancerígenos en los casos en los que se usa para la higiene íntima, de manera que resulta complicado determinar la atribución del cáncer al producto, pero la condena, por el Derecho estadounidense, puede basarse en la simple omisión de datos en los que se mencione la posibilidad de contraer cáncer por usar polvos de talco, aunque los mismos no tengan componentes cancerígenos.

En Europa, donde también existe la responsabilidad civil por defectos de información de los productos, no resultaría fácil ver una condena como la que se ha impuesto a Johnson & Johnson por varios motivos. Como indicó Fernando Pantaleón con un artículo que se publicó en El País en el año 1999, resulta difícil importar los elementos interpretativos y aplicativos del Derecho de Daños estadounidense por motivos sustantivos y procesales. Por un lado, en Europa, la responsabilidad civil extracontractual tiene una función exclusivamente reparadora, no incluyendo los llamados daños punitivos o de castigo, propios del ámbito anglosajón, que incrementan las cuantías indemnizatorias de una manera contundente. Por otro, en Europa no existe una amplia aplicación de reglas procedimentales que incluyan la intervención del tribunal del jurado, cuyos miembros siempre se identifican más con el perjudicado, que es el demandante, que con el empresario demandado.

Fácil será ver el hundimiento de Johnson & Johnson, cuyo equilibrio patrimonial se va a ver alterado por un motivo fácilmente perceptible. Realmente, es muy difícil que la compañía pueda sobrevivir económicamente a todas las condenas indemnizatorias que va a llegar a sufrir durante los próximos años.