Juan Ignacio Navas Marqués
- El pasado 16 de septiembre fue admitida la demanda presentada por los accionistas de Abengoa Shares
- La actual dirección de Abengoa tendrá 20 días hábiles para contestar
- En la vista del próximo 24 de septiembre las partes podrán exponer “lo que convenga a su derecho”
El próximo jueves 24 tendrá lugar en los juzgados de Sevilla la vista de la suspensión cautelar del plan de reestructuración de Abengoa solicitada por los accionistas de Abengoa agrupados en Abengoa Shares que representa ya el 14,5% del capital de la compañía.
Abengoa Shares pidió la suspensión cautelar alegando que no hacerlo produciría un “daño irreparable” para los accionistas de la compañía que verían diluída su participación en la nueva Abengoa (Abenewco1) hasta el 2,7% del capital. “Se pretende hacer una reestructuración de espaldas a los accionistas, sin aprobar cuentas, sin convocar junta y con un informe de valoración del que todavía no se ha explicado por qué se ha pedido ni a quién”, explica Juan Ignacio Navas, socio-director de Navas & Cusí, despacho que asesora a Abengoa Shares.
El auto de citación señala que las partes “podrán exponer lo que convenga a su derecho, sirviéndose de cuantas pruebas dispongan”. Para Abengoa Shares será un hito “muy relevante” después de que la compañía haya decidido rechazar la solicitud de Junta Extraordinaria de Accionistas. “Ante la falta de transparencia y la ausencia de voluntad de negociación de la compañía, nuestra única alternativa ha sido la judicial; esperamos que la Justicia sea sensible para no provocar un daño irreparable sobre miles de pequeños ahorradores, proveedores y trabajadores de Abengoa”, señalan desde Abengoa Shares.
Abengoa Shares pidió prohibir expresamente al Consejo de Administración seguir adelante con el plan de reestructuración, en concreto, que se inhiban de votar en la junta de Abenewco1 que debe de aprobar el plan de conversión de bonos. También reclaman que se realice una anotación preventiva en el Registro Mercantil de Sevilla “para asegurar la efectividad” de la suspensión cautelar, señala la demanda.
Además, el pasado 17 de septiembre también fue aceptada la demanda presentada por Abengoa Shares contra el plan de reestructuración de la compañía presentada por el consejo presidido por Gonzalo Urquijo el pasado 6 de agosto. En dicha demanda los accionistas consideran que el Consejo de Administración ha violado la Ley de Sociedades de Capital (LSC) al “apropiarse” de las competencias de la junta de accionistas. En concreto, el art. 160 de la LSC señala que la Junta de Accionistas debe de aprobar la enajenación o aportación de activos esenciales. “Los activos de Abengoa han sido traspasados a la filial Abenewco1 -que pretenden convertir en la Nueva Abengoa- sin que nosotros hayamos dado el visto bueno”, señalaron los accionistas.
El presidente de Abengoa, Gonzalo Urquijo, señaló en la presentación a accionistas del pasado mes de agosto que la convocatoria de Junta de Accionistas no era necesaria puesto que ya existía autorización de la junta extraordinaria del 28 de marzo de 2019. Los accionistas responden que dicha junta autorizó la emisión de bonos convertibles “en un vencimiento mínimo de 5 años; es decir, la conversión no se produciría hasta el 2024 con posible extensión de 5 años”, señala la demanda. “Nada se informó de que había una posibilidad de que vieran diluída toda su inversión de forma acelerada”, añaden.
En la demanda de Navas & Cusí añaden además que la junta del 28 de marzo de 2019adolece de vicio de nulidad porque según el art. 29 de los estatutos se exige un quorum del 50% en primera convocatoria y del 25% en segunda y dicha junta contó con el 16,88%. “La misma junta sería impugnable, pero es que además, no autorizó a lo que Urquijo dice ahora que autoriza”, dicen desde Abengoa Shares.
La demanda admitida ahora a trámite también considera que el Consejo de Administración de Abengoa presidido por Gonzalo Urquijo ha atentado contra el art 511bis de la LSC que señala que la Junta de Accionistas debe de resolver sobre operaciones “equivalentes” a la liquidación de sociedad. “Obviamente el acuerdo del 6 de agosto es equivalente a la liquidación”, apuntan desde Abengoa Shares.
También cuestionan en la demanda por qué 153 millones de euros de acreedores permanecen en Abengoa en lugar e haber sido traspasados a Abenewco1, la nueva Abengoa a la que el Consejo remite “toda” la cuestión financiera según la información remitida por el Consejo a la CNMV el pasado 27 de julio, “pocos días antes de presentar el plan de reestructuración”, señalan desde Abengoa Shares. “Se ha producido una conducta espuria de las entidades financieras acreedoras de la sociedad actual filial Abenewco1, una estrategia encaminada a hacerse con la titularidad del negocio social en detrimento de los accionistas y en favor de varios acreedores”, concluye la demanda admitida a trámite.