QUÉ ES UN PROCEDIMIENTO POR VIOLENCIA DE GÉNERO
Es el procedimiento judicial que se inicia cuando una mujer denuncia por malos tratos, ya sean físicos o psicológicos a su pareja o expareja hombre. Tiene ciertas peculiaridades respecto de otros procedimientos penales, por lo que es importante contar con un especialista.
QUÉ SUCEDE TRAS LA DENUNCIA POR VIOLENCIA DE GÉNERO
Tras la denuncia por violencia de género, la policía procederá a la detención del denunciado, por protocolo. El detenido estará uno o dos días en los calabozos para, posteriormente, ser llevado al juzgado, donde el juez decidirá dos cosas: su puesta en libertad o la prisión provisional y, por otro lado, si impone una orden de alejamiento o no.
Es decir, una vez ha pasado la fase policial, el atestado llega al juzgado y se abre el procedimiento judicial.
FASES DEL PROCEDIMIENTO POR VIOLENCIA DE GÉNERO
Los procedimientos penales, incluídos los de violencia de género, constan de dos fases:
- Una primera fase de investigación judicial, en la que el juez instructor trata de llegar a la conclusión de si hay indicios de delito o no. La particularidad es que en violencia de género esta fase no se desarrolla en el juzgado de instrucción, sino en el juzgado de violencia sobre la mujer.
- Una segunda fase, que es el juicio. Solamente se llega a esta fase si en la anterior, el juez llega a la conclusión de que sí hay indicios de delito. Si no los hubiese encontrado, el juez debe archivar el procedimiento sin necesidad de ir a juicio.
DENOMINACIÓN DE LAS FASES EN FUNCIÓN DEL TIPO DE PROCEDIMIENTO
El contenido de las fases del procedimiento es el mismo, y el objetivo también: encontrar indicios de delito.
Sin embargo, en función del tipo de procedimiento, las fases se llamarán de forma distinta:
- Si es un procedimiento penal de Juicio rápido, la primera fase, de investigación judicial, se llamará diligencias urgentes.
- Si es un procedimiento penal como tal, la primera fase se llamará diligencias previas.
CONTENIDO DE LAS FASES DEL PROCEDIMIENTO POR VIOLENCIA DE GÉNERO
Con independencia de cómo se denomine y de qué tipo de procedimiento se trate, el contenido de la investigación es el mismo: la aportación de todas las pruebas posibles para poder concluir si existen indicios de delito o no.
En los procedimeintos de juicio rápido, la fase de diligencias urgentes suele estar compuesta solamente por la declaración de las partes (denunciante y denunciado) y de documentación médica.
Sin embargo, en los demás procedimientos penales (diligencias previas), se practican todo tipo de pruebas: declaración de denunciante y denunciado, testigos, documentos, grabaciones, peritos, etc.
Por tanto, una investigación en un procedimiento de diligencias previas es mucho más completa que en el de diligencias urgentes.
DURACIÓN DE LA FASE DE INVESTIGACIÓN
La duración de las diligencias urgentes de juicio rápido es muy breve, se realiza habitualmente todo en una mañana. Posteriormente, unas semanas después, se celebra el juicio, que es la segunda fase del procedimiento por violencia de género.
La duración de la investigación judicial en el resto de procedimientos penales, llamada diligencias previas, suele durar, como mínimo, un año. Y dependiendo de la complejidad del caso y de la carga de trabajo del juzgado donde recaiga, puede alargarse varios años.
CÓMO DETERMINAR LA MEJOR ESTRATEGIA DE DEFENSA
Para determinar la mejor estrategia posible en un procedimiento por violencia de género, es fundamental analizar si existen posibilidades reales de conseguir el archivo del procedimiento.
En caso de que sí sea posible, la estrategia debe ir orientada a hacer ver al juez que no existen indicios de delito y, por tanto, debe proceder a archivar el caso sin llegar a juicio.
En caso de que no sea posible conseguir ese archivo, la estrategia debe ir orientada desde el principio a las bases de la defensa en el futuro juicio, para incrementar así las posibilidades de ganarlo.
Para poder realizar ese análisis con garantías, es necesario que el abogado esté especializado en Derecho penal.
LA IMPORTANCIA DE CONTAR CON UN ABOGADO DE CONFIANZA
Si te encuentras inmerso en un procedimiento por violencia de género, es fundamental que el abogado defensor que escojas te genere total confianza. Ningún abogado puede asegurar los resultados, pero necesitas un especialista que incremente todo lo posible las posibilidades de ganar.
Además, es fundamental que el profesional que escojas sea honesto para decirte claramente si es viable conseguir la absolución, o es mejor orientar la estrategia a reducir la condena todo lo posible.