• Durante el evento, los ponentes han discutido sobre la figura del mecenazgo como fórmula para atender necesidades sociales y sobre si la reforma de la Ley llega acompañada del cambio cultural necesario

La reciente reforma de la Ley de Mecenazgo contempla la mejora de su régimen de incentivos fiscales, con el fin de crear un marco jurídico y fiscal que permita mejorar la protección social de los distintos agentes y aumentar la participación de inversores.

En el marco de esta modificación, Andersen, en colaboración con la Asociación Española de Fundaciones, ha organizado el evento 'La nueva Ley del mecenazgo: impulsando la cultura de la filantropía en nuestro país', en la que se ha abordado cómo esta reforma puede ser una herramienta clave para cambiar la cultura filantrópica en España.

La jornada ha contado con la participación de Ignacio Aparicio, Socio Ejecutivo de Andersen; Silvia de Andrés, Socia en el área de Fiscal de Andersen; Fernando de Rasche, Counsel del Departamento de Mercantil; Pablo Álvarez de Linera, Of Counsel en esta misma área; además de una visión práctica de la mano de Isabel Peñalosa Esteban, Directora de Relaciones Institucionales, Asesoría Jurídica y Comunicación en AEF; Carmen Reviriego, Presidenta de la Fundación Callia; y Leticia Rato, de ProFuturo Education, Programa de la Fundación Telefónica y Fundación la Caixa.

Contempla la nueva Ley una mejora importante de los incentivos fiscales con la intención de cubrir desde las aportaciones privadas las necesidades de financiación de las fundaciones que con sus actividades cubren importantes parcelas de nuestro estado de bienestar. También, crear un marco jurídico que permita mejorar la protección social de los distintos agentes involucrados.

Durante la jornada, Ignacio Aparicio ha explicado que Andersen ha unificado capacidades en un grupo de trabajo dedicado al Mecenazgo, que cuenta con profesionales de distintas materias que buscan conocer las necesidades e inquietudes de todas las partes involucradas en el tercer sector: compañías, patrimonios y fundaciones.

En este sentido, los ponentes han abordado los beneficios de convertirse en mecenas para las empresas y grandes patrimonios, tanto como inversión socialmente responsable, en el marco de los criterios ESG, como desde un punto de vista fiscal, puesto que reduce la carga tributaria de forma relevante y contribuyendo a la generación de bienestar. En particular, Silvia Andrés ha explicado que la deducción en el Impuesto sobre Sociedades puede llegar alcanzar el 50% con el límite del 15% de la base imponible del periodo, y ha añadido que “estas modificaciones pueden hacer de la norma una herramienta imprescindible para avanzar en el cambio de la cultura filantrópica de nuestro país, dado que aún estamos a la cola de los modelos anglosajones.”.

La norma también introduce importantes novedades en relación con los convenios de colaboración y su difusión. En este punto, todos los ponentes han coincidido en la necesidad de mejorar la transparencia y rendición de cuentas de las fundaciones a través de la elaboración de Códigos de buenas prácticas y de herramientas que permitan medir el impacto de los proyectos en los que colaboran, así como en la importancia de aunar esfuerzos entre fundaciones, en programas o en proyectos, logrando grandes iniciativas con un mayor impacto.