En los últimos años se han producido cambios sustanciales en la industria de los juegos de azar. El 3 de noviembre de 2020 se introdujo el Real Decreto 958/2020 de «comunicaciones comerciales de las actividades de juego». Una actualización de la Ley 13/2011 de 27 de mayo de regulación del juego que estableció el marco regulatorio para la actividad de juego. Algunas de las disposiciones adicionales introducidas en 2020 y 2021 afectan a los operadores de juego. Por ejemplo, la detección de comportamientos de riesgo de los usuarios o el control de las marcas/nombres comerciales promocionados.

Se apunta a un nuevo perfil de jugador

Este Real Decreto que afecta a los jugadores y a los casinos y empresarios, consta de seis partes diferenciadas:

• Preámbulo.
• Treinta y cinco artículos agrupados en tres capítulos.
• Cinco disposiciones adicionales.
• Una disposición transitoria.
• Una disposición derogatoria.
• Seis disposiciones finales.

El Capítulo I de este Real Decreto, llamado «Disposiciones generales», detalla el objeto de la norma. Consiste en el desarrollo de la Ley 13/2011 relativa a las condiciones regulatorias para un juego responsable o seguro. También hace mención a la protección de las personas consumidoras de los operadores de juego. Especifica su ámbito de aplicación y afecta a las actividades de juego sometidas a identificación de usuario y con cuenta de juego.

Nueva política de bonos

En cuanto a los bonos y la forma de abonar las ganancias, se modifica el apartado 1 del artículo 38. De ahora en adelante el operador abonará los premios por el procedimiento y medios de pago establecido en las reglas particulares del juego. A su vez, pondrá a disposición de los participantes el abono de los premios por el mismo medio que aquellos hubieran empleado para la participación en el juego. No obstante, estarán exentos del cumplimiento si las normas o condiciones aplicadas por este medio de pago no le permitieran realizar el abono.

Por otro lado, en el Capítulo II se incluyen disposiciones específicas, que afectan a determinadas formas de comunicación comercial. Cabe destacar el patrocinio, los bonos u otras iniciativas promocionales. También regula la prohibición de personas o personajes de relevancia o notoriedad pública. En consecuencia, no podrán hacerse en las comunicaciones comerciales, las aplicaciones de juego gratuito o los sistemas de exclusión publicitaria.

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En definitiva, queremos resaltar el hecho de que se han introducido medidas reforzadas sobre el abono de los premios en la disposición final segunda.

Cambios en la publicidad y anuncios

El Título I de este Real Decreto denominado «las comunicaciones comerciales de las actividades de juego», parte de la previsión de desarrollo reglamentario de la actividad publicitaria (artículo 7, Ley 13/2011). Cubre los distintos aspectos de la publicidad, patrocinio, promoción o cualquier otra forma de comunicación comercial de las actividades de juego.

Entre otras disposiciones, determina que la autoridad encargada de la regulación del juego deberá mantener actualizados y accesibles aquellos títulos habilitantes de los diferentes operadores en su página web. En su caso, incluirá también las diversas marcas, designaciones comerciales, páginas web, así como apps móviles a través de las que comercializan sus juegos. Del mismo modo, incorporará cualquier otra resolución posterior que altere las condiciones de ejercicio de estos.

Por otro lado, las comunicaciones comerciales de los operadores de juego se deberán identificar claramente. Además, en las comunicaciones comerciales de los operadores de juego se tendrá que indicar claramente la denominación social o el nombre o imagen comercial del operador.

Se elimina el patrocinio en equipos deportivos

Con la introducción del nuevo Decreto, quedarán prohibidas las comunicaciones comerciales que se consideren contrarias al principio de juego seguro. En concreto, aquellas que vinculen, asocien o relacionen las actividades de juego con percepciones que representen éxito familiar, social, personal, deportivo o profesional, entre otras.

Además, se consideran contrarias al principio de protección de menores de edad las comunicaciones comerciales que se difundan en el interior o exterior de estadios, salas o recintos deportivos. Se prohibirán en el momento en que se celebren eventos o competiciones donde participen exclusivamente menores de edad.

Regulación del 2012: clave en la industria del juego

En el marco de la corregulación en 2012 se aprobó un Código de Conducta sobre Comunicaciones Comerciales de las Actividades de Juego. Este estaba suscrito por la práctica totalidad de los operadores de juego de ámbito estatal. Esta Regulación hizo que nuestro país se beneficiara económicamente de la industria de los casinos y casas de apuestas deportivas. Un sector que crece velozmente. Los avances tecnológicos están fuertemente ligados a este crecimiento y, en el contexto que se vive hoy en día, Internet es el motor que impulsa la reactivación de la economía.

Conclusión

En definitiva, podríamos decir que las leyes que regulan el funcionamiento de los casinos en línea varían considerablemente de unos países a otros. La mayoría de ellos, como en el caso de Europa, tienen su propio enfoque estatal de las cuestiones reglamentarias.

Por lo que respecta al futuro de los casinos online, este se prevé brillante. Tras la pandemia del COVID-19, los jugadores habituales, así como los aficionados, se han visto obligados a recurrir al mundo virtual. Es por ello que no cesan de surgir nuevas plataformas que ofrecen experiencias cada vez más realistas, atrayendo así a más jugadores con premios muy golosos.