- El 90% de las empresas están reevaluando completamente sus planes de riesgos
El 48 %, de las empresas considera que la pandemia ha sido peor o mucho peor de lo esperado, tal y como revela el sexto informe anual Global Risk Landscape, de BDO, una de las mayores organizaciones internacionales de servicios profesionales.
La situación de incertidumbre creada por la pandemia también ha desafiado a las prácticas existentes de gestión de riesgos, y el 90 % de los ejecutivos afirma que los acontecimientos de 2020 han llevado a su organización a reevaluar por completo su plan de riesgos, según se desprende del informe elaborado por BDO.
Aquellas empresas que, según la encuesta de BDO (realizada a 500 directivos de Europa, Oriente Medio, África, Asia-Pacífico y América), han corrido algún riesgo previamente, han tenido un mejor comportamiento ante la pandemia y solo un 25% ha experimentado un impacto peor de lo previsto. En cambio, de aquellas empresas que no han tenido una experiencia previa y tienen aversión al riesgo, un 52 % ha experimentado un impacto peor.
“Una de las principales lecciones aprendidas que arroja nuestro informe es la necesidad de que las empresas reconsideren su enfoque en la toma de decisiones para poder prosperar ante escenarios de incertidumbre sin precedentes”, asegura Enric Doménech, socio responsable de Risk Advisory de BDO en España. Quien añade que “se confirma que las empresas deben ser ágiles en su toma de decisiones y en sus prácticas de gestión de riesgos y deben disponer de mecanismos de decisión bajo presión y con grandes incertidumbres”.
El informe elaborado por BDO también revela diferentes experiencias en los distintos sectores e industrias. El sector de los servicios profesionales se ha visto menos afectado que otros, y sólo el 3 % ha descrito el impacto de la pandemia como mucho peor de lo esperado. La industria manufacturera también ha afrontado la crisis de la pandemia relativamente bien, y muchos de estos operadores han ajustado sus modelos de negocio para fabricar productos esenciales como equipos de protección personal o ventiladores.
Con independencia del sector, los asuntos relacionados con los recursos humanos pasaron a un primer plano. Cuando se les preguntó qué riesgos causaron la mayor presión durante la pandemia, el 45% de los ejecutivos citaron la baja satisfacción y el bienestar de los empleados, por delante de la productividad de éstos. Muchos empleados y profesionales se han enfrentado a nuevos retos, como el cambio repentino al teletrabajo, lo que obligó a las empresas a desarrollar nuevas formas de mantener a los equipos comprometidos, motivados y sintiéndose apoyados.
Otra de las enseñanzas más relevantes que ha dejado la pandemia, según el estudio de BDO, reside en el cuestionamiento sobre la rigidez de los marcos de gestión de riesgos y la necesidad de mejoras en los modelos y procesos de evaluación y respuesta a los riesgos, así como la necesidad de estar muy atentos e incluir dentro de los marcos de gestión y de las estrategias de negocio los aspectos medioambientales, sociales y de gobernanza.
De acuerdo con Enric Doménech, “la cultura y actitud frente a los riesgos se ha demostrado que ha sido uno de los factores clave. Las compañías con una cultura más arraigada de gestión ante los riesgos y que han sabido tratar los problemas a tiempo y reaccionar de forma rápida, han salido mejor y más rápido de la crisis provocada por la pandemia, encontrando oportunidades en la incertidumbre”.
Nigel Burbidge, responsable global de Risk Advisory de BDO, afirma: "La pandemia ha reforzado la necesidad de que las empresas se preparen para el futuro con el fin de mitigar los trastornos en tiempos de crisis. Las empresas deben estar preparadas para reaccionar y adaptarse a la incertidumbre, y las que lo gestionan con mayor eficacia son las que son más receptivas a asimilar los riesgos. Más allá de la simple protección contra los impactos negativos de una crisis, una gestión eficaz de los riesgos también permite a las empresas identificar nuevas oportunidades”.
"La eficacia de la operativa de la gestión de riesgos puede mejorarse con la tecnología. Sólo el 11 % de las empresas encuestadas utiliza actualmente la tecnología para prever futuros riesgos potenciales. Sin embargo, hemos visto un aumento de la inversión en tecnología durante la pandemia, incluyendo iniciativas de transformación digital y análisis de datos. Vincular estas inversiones con la gestión de riesgos podría ayudar a las empresas a afrontar mejor, o incluso a crecer, cuando llegue la próxima crisis".