Pamplona, 12 feb (EFE).- La violencia económica es de las más "desconocidas", pero una de las más "frecuentes" cuando se produce una separación, según ha explicado la profesora de la Universidad de Extremadura, Inmaculada Domínguez.
Domínguez ha manifestado a EFE antes de abrir la jornada sobre violencia económica que se ha celebrado en Civican en Pamplona, donde distintos expertos han abordado este asunto, dirigido a la ciudadanía en general, pero al personal que trabaja con casos de violencia de género en particular.
La profesora ha explicado la importancia de dar visibilidad a esta violencia específica, que son situaciones que "siempre se han visto como normales en la convivencia, normales en las maneras de estructurar las relaciones de pareja y la vida doméstica". "Estamos poniendo de manifiesto cosas que siempre hemos entendido como normales y no como tácticas de abuso", ha sostenido.
"Aquí subyace el tema del dinero, muchas veces no se habla de dinero, es un tema tabú, hay muchos estereotipos sobre cómo lo gestionan las mujeres y cómo lo controlan los hombres. Está vinculado también con las brechas de género, porque si lográramos que todo el mundo tuviera los mismos recursos y salarios, a la hora de enfrentar una separación y convivir no existiría esa dependencia y esa dificultad", ha añadido.
Domínguez recomienda estar bien asesorada a la hora de tomar decisiones como firmar un convenio de separación, para tener todos los escenarios contemplados. Ha asegurado que no existe un perfil de víctima concreta. "En personas mayores, muchas veces las mujeres no han cotizado lo suficiente y son los hijos los que tienen que sustentar", ha puesto como ejemplo.
En la jornada ha estado presente la directora de la unidad de coordinación de la violencia contra la mujer de la Delegación del Gobierno en Navarra, Estrella Lamadrid, quien ha explicado que se trata de hacer consciente de esta violencia al personal técnico y a la sociedad en general.
"Se trata de una realidad a la que hasta ahora no le hemos prestado tanta atención, pero que ha existido siempre, igual que la violencia física. Nos hemos centrado mucho en la violencia física y psicológica, pero este tipo, que es grave también, no se había tenido en cuenta", ha declarado a EFE.
A la hora de separarse, la independencia económica o la dependencia "condiciona mucho, porque si una mujer no tiene un sueldo mínimo para poder subsistir, no se plantea separarse".
Desde el punto de vista de la Administración, Lamadrid considera clave incluirlo como delito: "Sería un paso muy adelante. Se considera un delito de impago, pero no un tipo de violencia. Pensamos que puede enmarcarse de otra manera con penas de prisión y el comportamiento sería otro. Hasta ahora, queda impune"
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