Hoy en día se intenta relacionar el sector legal con la innovación que se propone en estos tiempos donde resultan imprescindibles las nuevas tecnologías. Se intenta promover esto mismo para que este sector se encuentre dentro del mundo tecnológico. Siempre relacionamos a España como que no es una pionera en la era de la innovación, pero en este sector debemos pensar lo contrario.
Resulta más que evidente que nos encontramos en la época tecnológica, del cambio, del estar en todos sitios pero en ninguno a la vez, de que triunfará la cabeza más innovadora que sume todos y aquellos valores que hoy en día resultan tan importantes para estas nuevas sociedades. Pero, ¿somos verdaderamente conscientes de todo su alcance?
No hace más de 6 meses que en mi caso, empecé las clases para en un futuro tener el grado en Derecho. Cierto es, que en el momento que tomé la decisión de iniciar esto lo relacione con un montón de libros cuyo peso se me hacía inimaginable y como algo tecnológico, el Word para presentar los trabajos. Ni es falso ni totalmente verdad, pues lo que sí es muy cierto es que se tiende a relacionar el mundo legal con un “clásico”. La cantidad de manuales y códigos tampoco me sorprendió porque como ya he dicho, llegaba más que preparada. Pero también es cierto que ya no es necesario ocupar un estante de tu cuarto en el diccionario jurídico pues lo encontramos en internet de forma muy cómoda y rápida. Para la investigación tampoco es necesario ir a bibliotecas, buscar libros, archivos, hacer visitas a las hemerotecas… si no que lo podemos encontrar otra vez en la red de internet o en nuestro caso en la Biblioteca Virtual que nos ofrece la Universidad Pontificia de Comillas como alumnos.
Además, resulta interesante conocer que en nuestro país encontramos ferias que potencian esto de lo que estoy hablando, destaca la celebrada en la Ciudad Condal el 23 y 24 de Octubre del año 2015, llamada Legal Hackathon Barcelona.
Se propusieron una serie de retos que potencian la unión de la tecnología comunicativa con el sector legal. El reto consiste en crear una plataforma web o un App en la cual el usuario guarde sus propiedades digitales a fin de que en su fallecimiento no se pierdan y los herederos puedan tener acceso a ellas.
Por mi parte, voy a proponer algo que resulta muy simple y se podría adaptar a nuestros días. Hoy en día la citación de los tribunales a imputados o testigos por ejemplo, se realiza por burofax. El burofax es un servicio que se utiliza para enviar de manera urgente y segura documentos que necesiten de una entrega fehaciente mediante la entrega bajo firma del destinatario. Esto podría realizarse aprovechando de las nuevas tecnologías y el medio, la creación de un sistema que se envíe por correo electrónico y con el nuevo Documento Nacional de Identidad electrónico se verifique y de fe de que ha sido recibido.
Para finalizar, he de decir que resulta relevante como muestro en las líneas anteriores la importancia de la actualización y que menos del sector del cual me estoy preparando académicamente para formar parte. Formo parte de la generación que fue a clase con libros y escribió en papel pero la misma que nos informábamos de las noticias a través de las Redes Sociales. Por tanto, apoyo de una forma total esta incorporación de una forma activa del sector legal a las tecnologías potenciando la innovación de este sector pero sin perder nunca la figura del abogado como persona.
Paula Rico Arroyo, estudiante de primero de Derecho en la Universidad Pontificia de Comillas.
LegalHachathon. (28 de 10 de 2015). Legal Hackathon. Recuperado el 15 de 03 de 2016, de Legal Hackathon: http://legalhackathon.es/cronica-del-legal-hackathon-barcelona/