§ 1. Hace unas semanas tuve ocasión de participar en un foro legal en el que se debatían “los problemas actuales del sector legal” peruano atendiendo a las dimensiones de las firmas legales (firmas grandes, firmas medianas, firmas boutiques)[1]. Mientras preparaba mi intervención en representación de la firma boutique de la que soy Socio (Caro & Asociados)[2], reflexionaba en torno al modo en que la pandemia había afectado nuestro sector específico y meditaba sobre las razones que habían permitido que nuestra firma haya continuado su línea de crecimiento a pesar de la externalidad; en ese contexto, pude reconocer una cuestión que, pese a su obviedad, no reconocí en su real dimensión hasta ese momento: el impacto de ser una organización in comply with the law.
[1] Me refiero a la Mesa de Trabajo “Problemas actuales del sector legal” organizado por el Gremio de Servicios- Sector Legal- de la Cámara de Comercio de Lima, desarrollado el 21 de abril de 2022.
[2] https://www.ccfirma.com/.
En efecto, cuando un despacho de abogados brinda servicios legales de compliance es norma de coherencia que, además, asimile el mismo como pauta de orientación de sus actividades como organización. La implantación de una cultura de cumplimiento normativo supone, además del cumplimiento de la ley, la imposición de un sistema de gestión de riesgos operacionales, financieros, legales y reputacionales en una organización. El cumplimiento normativo nos permite anticiparnos (dentro de lo razonable) a las situaciones que puedan afectar nuestra organización. Fue precisamente esa visión empresarial y, sobre todo, mantenerla pese a las circunstancias de urgencia, la que permitió a nuestra firma sortear los impactos de la externalidad pandémica.
Claro, es importante que las firmas de abogados (o cualquier organización) en situaciones de urgencia no cedan a la tentación de reducir (o eliminar) los costos relacionados a la existencia de un sistema de gestión o de prevención de riesgos. El compliance, más que un costo, es inversión.
Por el contrario, mantener esta apuesta implica asumir la idea de mejora continua y con ello la expansión del cumplimiento a otros espacios de la organización (otros procesos u otras partes de la estructura empresarial) y a otros tipos de riesgos. De ese modo, si la organización ha implementado el cumplimiento normativo en el ámbito anticorrupción su paso siguiente será lograr su certificación (ISO 37001) y una vez que la obtuvo debe procurar que los riesgos cuya prevención se pretende no sean solo los anticorrupción sino deberá irse extendiendo a otros ámbitos (prevención de riesgos laborales, compliance de protección de datos, entre otros). El cumplimiento normativo, una vez instalado, no debe parar.
§ 2. Precisamente ese primer vértice (el cumplimiento normativo como parte del ADN de una firma de abogados) es el que dio viabilidad a los otros dos vértices relevantes para nuestra organización: (i) la innovación tecnológica como una constante dentro de la actividad de la firma; y, (ii) la paridad de género en los despachos de abogados.
§ 2.1. La innovación tecnológica (segundo vértice) ha tenido impacto a nivel interno y externo.
Por un lado (internamente), se expresó no solo en la incorporación de diversas herramientas tecnológicas que nos han permitido mejorar el servicio legal prestado (mejoras en la infraestructura tecnológica, proliferación del uso de la nube, implementación de medidas de seguridad informática y de confidencialidad de la información, incorporación de herramientas de automatización de los procesos internos y externos) y de difusión de información legal mediante el uso de las redes sociales, sino que nos ha permitido poner en funcionamiento una división de AI Legal Tech que ofrece servicios de asesoría legal y defensa procesal en materia digital, consultoría legal para la transformación digital de las organizaciones y gestión de asuntos regulatorios.
Precisamente esa apuesta por la innovación tecnológica permitió mantener un servicio legal de alta calidad y con el dinamismo que requieren estos tiempos de forma compatible con el teletrabajo que imperó en el momento del confinamiento provocado por la pandemia.
§ 2.2. Por otro lado (externamente), la innovación tecnológica ha permitido hacer frente a las dificultades del surgimiento de lo que particularmente denomino justicia on streaming.
En efecto, los litigios judiciales son (y serán) en adelante desarrollados frente a la pantalla de un ordenador o un dispositivo móvil. No es difícil reconocer los problemas que la pandemia generó en la administración de justicia (Poder Judicial, Ministerio Público, Policía): la deficiente infraestructura tecnológica; la brecha digital y las dificultades de acceso de internet.
Pero la externalidad no solo afectó a la administración pública, sino también a múltiples despachos de abogados que obviaron incorporar a tiempo medidas de innovación tecnológica. En las audiencias podíamos percibir cómo las fallas de conectividad afectaban tanto a operadores jurisdiccionales como a los abogados.
§ 2.3. El tercer vértice (paridad de género) es consecuencia natural de la adopción del cumplimiento normativo como cultura empresarial.
En nuestra firma hemos estabilizado la regla de la equidad de género que, compatibilizada con la existencia de una línea de carrera, con perfiles de puestos definidos y política contrarias a la discriminación y el acoso, ubican a nuestras abogadas en posiciones relevantes y hacen de nuestro ambiente laboral uno grato para el género femenino. Algunos ejemplos: nuestro staff cuenta con una abogada directora; nuestra división de AI Legal se encuentra liderada por una abogada y, nuestra Oficialía de Cumplimiento está a cargo de una abogada.
§ 3. Desde nuestra visión, un despacho de abogado boutique debe tener por objetivo alcanzar que los tres diversos vértices descritos (cumplimiento normativo, innovación tecnológica y paridad de género) le asemejen lo más posible a un triángulo equilátero. Las dimensiones de este tipo de organizaciones les hacen más dúctiles para cumplir con estos objetivos y asumir con esperanza la nueva normalidad.
