En el acto estuvo presente Leopoldo López Gil, padre del opositor venezolano encarcelado tras denunciar la degradación del sistema político y la regresión en el respeto a los derechos y libertades en Venezuela. Mientras tanto en el país sudamericano ha aparecido de forma sorprendente el expresidente Rodríguez Zapatero con la intención de mediar entre el Gobierno de Maduro y la oposición en un estado de excepción. Junto a Zapatero también está prevista la participación de los ex presidentes Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá).
En su intervención López demandó lo solicitado por Naciones Unidas: la liberación inmediata de todos los presos políticos y el respeto a los DDHH. Su intervención fue muy dura frente al gobierno de Caracas, al que acusó de estar cometiendo violaciones de los derechos fundamentales de muchos jóvenes detenidos de forma indefinida, algo propio de regímenes dictatoriales.
Hay que recordar que el pasado 10 de septiembre de 2015 la justicia venezolana declaró culpable a Leopoldo Lopez de unas revuelta que tuvieron lugar un año antes por una manifestación no autorizada que se saldó con 43 muertos. Se le acusó de incitación pública a la violencia a través de supuestos mensajes subliminales y condenó a 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas de prisión. Su encarcelamiento es objeto de controversia, y en octubre de 2014, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos pidió la liberación de los detenidos en relación con las protestas. La Organización de las Naciones Unidas, la Unión Europea, Amnistía Internacional, Human Rights Watch y diversas organizaciones internacionales de derechos humanos han condenado este arresto por haber sido motivado políticamente
El acto también contó con representantes de la sociedad como Rafael Pastrana, Presidente de la Confederación Española de Estudiantes de Derecho, quien alegó la necesidad de defender el derecho a un juicio justo para cualquier ciudadano. Numerosos juristas y estudiantes arroparon el acto, recibiendo en su clausura las palabras de Leopoldo López Gil entre lágrimas.
Por su parte Juan Gonzalo Ospina, Presidente de la Agrupación de Jóvenes Abogados de Madrid, pidió el respeto a las garantías procesales, y a los Derechos Humanos tanto en la crisis de los refugiados, como en los juicios en Venezuela, sin olvidar que en España una reforma de la Ley procesal es necesaria para reforzar las garantías procesales y no señalar sin autocrítica los desmanes también del sistema español. Ospina, recordó que Venezuela como Estado signatario de tratados internacionales debe respetar los DDHH como obligaciones legales propias.
Este evento fue clausurado por un grupo de estudiantes que reivindicaron el papel de la abogacía, como motor de cambio y de opinión de la sociedad civil, allí donde más se nos necesita.
No hay comentarios.