En los últimos años existe una marcada tendencia a favor de la custodia compartida tras un caso de divorcio. En 2016, último año del que tenemos datos oficiales, según el Instituto Nacional de Estadística la custodia compartida de los hijos fue otorgada en el 28,3% de los casos de divorcio y separación en España.
Estos datos reflejan la evolución que se está experimentando en los últimos años, ya que supone un incremento de casi cuatro puntos comparado con los datos del año anterior, 2015, donde la custodia compartida se asignó en el 24,7% de los casos.
El aumento del peso de la custodia compartida en España es aún más evidente si comparamos con los resultados de hace unos años. Y es que hasta el año 2010 la custodia compartida tuvo un papel bastante residual en España, siendo este año el primero en el que se superó el 10%.
El hecho de que en menos de una década se haya prácticamente triplicado el porcentaje de custodias compartidas otorgadas en España, pasando del 9,7% en 2007 a un 28,3% en 2016, hace presagiar que en los próximos años la custodia compartida seguirá ganando peso en España.
¿Estamos ante el principio del fin de la custodia monoparental como opción mayoritaria en España? Aún queda camino que recorrer, pero la tendencia actual así parece indicarlo.
Es importante destacar que el proceso de adopción de la custodia compartida se aceleró notablemente desde el año 2009, cuando el Tribunal Supremo estableció las condiciones necesarias para que la Justicia determinara la conveniencia o no de la custodia compartida.
Actualmente basta con que uno de los progenitores solicite la custodia compartida para que en los juzgados se valore la propuesta, aunque no es condición necesaria ya que la idea puede partir del propio Juez si considera que es lo más adecuado para el menor.
Y es que es precisamente el interés del menor lo que hace que la custodia compartida sea la opción ideal, siempre que las condiciones lo justifiquen. “La custodia compartida se aplica siempre que se den los requisitos necesarios, porque es la opción que más solidez afectiva y psicológica da a los hijos”, afirma Rosa Bocanegra, abogada especialista en derecho de familia y titular del despacho Bocanegra Abogados.
Que sea la opción más adecuada para el menor no implica que sea posible aplicarla en cualquier escenario. Según nos explica Rosa Bocanegra, hay tres condiciones que deben cumplirse necesariamente para que se pueda otorgar la custodia compartida: “Por un lado, que los horarios y trabajos de ambos progenitores sean compatibles con este tipo de custodia. Por otro, que, aunque haya desavenencias entre los padres, estos no muestren esa discordia en relación con sus hijos. Y, por último, que los domicilios estén cercanos”.
A pesar de que la custodia compartida está ganando peso en España, hay que destacar que su implantación no está siendo la misma en todo el territorio nacional. Destacan especialmente cinco Comunidades Autónomas que a día de hoy ya han legislado para priorizar la custodia compartida. Se trata de Aragón, Comunidad Valenciana, Euskadi, Navarra y Cataluña.
¿Conseguirá la custodia compartida imponerse como la opción mayoritaria en España? Los datos así parecen indicarlo. Habrá que estar pendiente del INE en años sucesivos para comprobar si la tendencia se mantiene.
Fuentes:
Estadísticas de Nulidades, Separaciones y Divorcios (Año 2016)
¿Cómo se divorcian los españoles?
Custodia compartida, la guía completa con opiniones de expertos