Lo que parecía una discusión por un aparcamiento, acaba con Braulio investigado por un presunto delito de lesiones a Jacinto y amenazas a Clara, ya que Jacinto y Clara acuden a la Guardia Civil donde denuncian que Braulio intenta atropellar a Clara, insultándola y amenazándola y que a Jacinto una de las ruedas del coche conducido por Braulio le “pasó por encima de un pie” causándole lesiones. Además, aportan un video grabado por un testigo con su móvil desde la azotea de un inmueble cercano y del que la Guardia Civil se limita a extraer fotogramas que adjunta en el Atestado.
La versión denunciada la ratifican Jacinto y Clara en su declaración ante el Juzgado, manifestando Braulio “que al darse a la fuga al denunciante le pasó la rueda trasera derecha por encima del pie izquierdo”, siendo visto por el médico forense, a quien Braulio también manifiesta que “le ha pasado la rueda trasera del coche por el primer dedo de pie izquierdo”. El médico forense emite un informe que recoge como lesiones “artritis postraumática”, precisando para su curación tratamiento farmacológico e inmovilización preventiva durante dos días, tardando en curar dos días no impeditivos. Clara ratifica que el coche pasa por encima del pie de Jacinto y mantiene que fue insultada y amenazada, incluso que el vehículo no se paró estando ella delante.
Por ello, se toma declaración a Braulio como investigado por delito de lesiones y de amenazas, quien niega los hechos y a la vista del informe médico forense, el procedimiento a continuación se registra como procedimiento sobre juicio sobre delitos leves.
Llegado la fecha de juicio por delito leve, los denunciantes Jacinto y Clara, tras jurar decir verdad, mantienen nuevamente los hechos, el denunciado Braulio los niega y su defensa, ejercida por el letrado Ricardo V. Agud Spillard de Escudo Legal, solicita el visionado del video que había aportado aquel testigo, lo que se acuerda por el Juzgador.
El video es demoledor contra la versión de los denunciantes.
En ningún momento se escuchan ni insultos ni amenazas y se observa claramente que las ruedas del vehículo de Braulio no pasan por encima de ningún pie y que es el propio Jacinto quien propina una fuerte patada con su pierna izquierda al vehículo, marchándose el vehículo sin más.
Pese a visionarse el video, los denunciantes solicitan la condena de Braulio. Sin embargo, el Ministerio Fiscal solicita la absolución de Braulio a lo que se adhiere la defensa de Braulio, quien, además, solicita se deduzca testimonio contra los denunciantes por si la declaración de estos pudieran ser constitutivos de un delito contra la administración de justicia.
El Juzgado dictó Sentencia por la que absolvía a Braulio y fallaba “Dedúzcase testimonio de las presentes actuaciones, junto con la grabación de la vista, por si la declaración de Jacinto y Clara, fuesen constitutivos de un delito contra la administración de justicia”.
Jacinto y Clara cometieron un grave error. Por intentar presumiblemente obtener una indemnización (que hubiera sido ridícula) y vengarse por una absurda discusión, faltaron a la verdad por lo que se verán sometidos a una investigación judicial. ¿Les merecía la pena? Evidentemente no.