La Sección Tercera de Audiencia de Alicante ha condenado a diez años de prisión al monitor de la piscina de un colegio por abusar sexualmente de dos compañeras de trabajo y violar a una de ellas. La Sala le impone cuatro años de prisión por dos delitos de abusos sexuales continuados y seis años de prisión por un delito de agresión sexual.Además, el condenado, que era entonces el marido de la directora del centro, deberá indemnizar con 3.000 euros a una de las víctimas y con 9.000 euros a la otra.
Los hechos sucedieron tras la comida de Navidad que celebraron los trabajadores de este colegio en 2010, cuando, según relata la sentencia, el condenado pidió a una de las víctimas que le llevara a casa. Durante el trayecto, le hizo parar el coche en una zona poco habitada, se abalanzó sobre ella y la forzó sexualmente.
Hasta final de curso y durante el curso siguiente, el acusado sometió a esta monitora a tocamientos y le realizó insinuaciones de carácter sexual. Por su parte, la otra víctima, que trabajaba también atendiendo a los alumnos en los vestuarios de la piscina, sufrió tocamientos por parte del marido de la directora desde noviembre de 2011 hasta enero de 2012, fecha en la que fue despedida.
Uno de los tres miembros de tribunal que ha dictado la sentencia ha emitido un voto particular en el que expresa su discrepancia con la condena por agresión sexual. El magistrado manifiesta sus dudas respecto de que la relación sexual produjera en contra de la voluntad de la víctima porque, a su juicio, “no hay ningún dato objetivo que permita corroborar mínimamente la versión” que da la víctima. Por este motivo, el magistrado considera que el hombre debió ser condenado por los dos delitos de abusos sexuales, pero absuelto del delito de agresión sexual.
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