Valladolid, 23 mar (EFE).- La Audiencia Provincial de Valladolid ha condenado a once años de prisión a un hombre de 41 años, D.D.J., por abusar sexualmente de una niña de 8 años, hija de su pareja cuando ocurrieron los hechos, entre diciembre de 2019 y febrero de 2020 en un camping de la provincia vallisoletana, han informado a EFE fuentes del caso.

El fallo de la resolución judicial condena al procesado, residente en Vitoria, por un delito continuado de abuso sexual a menor de 16 años, agravado por la situación de convivencia y parentesco.

La sentencia prohíbe además al acusado aproximarse a menos de 500 metros de la víctima, su domicilio, lugar de estudios o trabajo o cualquiera en el que se encuentre durante veinte años.

Por el mismo periodo, le prohíbe comunicarse con la joven por cualquier medio o procedimiento, además de fijar inhabilitación especial para el ejercicio de los derechos de patria potestad, tutela, cuartela, guarda o acogimiento por un tiempo de seis años.

Fija también el fallo inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividad, retribuidos o no, que conlleve contacto regular y directo con menores de edad durante veinte años y la medida de libertad vigilada por un tiempo de siete años.

El procesado deberá además indemnizar a la menor en 16.750 euros, según la sentencia, que absuelve a D.D.J de un delito de lesiones gravado, del que también había sido acusado.

La vista oral comenzó el pasado lunes, a puerta cerrada, por hechos ocurridos entre diciembre de 2019 y febrero de 2020, poco antes de que comenzara la pandemia.

El supuesto autor era en esa época pareja de la madre de la niña y los sucesos ocurrieron en distintas fechas en una caravana en la que residían.

Fue después de que la menor escribiera lo que había ocurrido en un diario, mientras se encontraba con su padre, cuando se planteó la denuncia, en 2020, por abusos ocurridos al menos en cuatro ocasiones, según han precisado fuentes del caso.

Durante el juicio, el encausado negó que ocurrieran los hechos por los que fue acusado, mientras la menor -a través de prueba preconstituida, con la reproducción en Sala de su testimonio-, expuso que sí sucedieron los abusos.