Según las autoridades de Beluchistán, el ataque se produjo cuando decenas de abogados acudieron al hospital de Quetta en el que se encontraba el cuerpo de Bilal Anwar Kasi, presidente del Colegio de Abogados de Beluchistán, asesinado a tiros esa misma mañana cuando se dirigía a un tribunal en Quetta.
Bilal Anwar Kasi estaba especialmente comprometido con el restablecimiento de la paz que se había alcanzado recientemente en la provincia, sacudida por la violencia confesional.
El ministro del Interior de la provincia de Beluchistán, Sarfraz Bugti, ha calificado este ataque como un “acto de terrorismo” dirigido directamente contra los abogados presentes en el hospital.
Por su parte, Ali Zafar, presidente del Colegio de Abogados adscrito a la Corte Suprema ha condenado el atentado como “un ataque a la justicia”.
El Observatorio Internacional de Abogados en riesgo muestra su solidaridad con el Colegio de Abogados de Beluchistán y con todas las familias de las víctimas y hace un llamamiento a las autoridades provinciales y nacionales para que lleven a cabo una investigación a fin de identificar a los autores de este atentado y para que se adopten las medidas necesarias que garanticen la seguridad de los abogados.
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